Carlos III contrató a los mejores médicos por una patología crónica del Príncipe Guillermo

Desde la adolescencia, Guillermo de Gales necesita apoyo médico

Carlos III contrató a los mejores médicos por una patología crónica del Príncipe Guillermo

A pesar de que de cara al público, el Príncipe Guillermo siempre ha sido capaz de mostrar una cara amable y sonriente, la realidad es que según han podido revelar fuentes cercanas a la Casa Real de Gran Bretaña, el hijo mayor de Carlos III está a años luz de ser ese hombre risueño y alegre. Pues, desde que llegó a la adolescencia, el Príncipe de Gales ha mostrado un carácter agrio, seco e incapaz de mostrar empatía alguna por los demás. Una situación que obligó a Carlos III a contratar a los mejores especialistas de Reino Unido.

El Príncipe Guillermo nunca destacó por ser una persona amable. Desde la adolescencia mostró un carácter muy desafiante con todos aquellos a los que no consideraba que estaba a su altura. Una situación que se comenzó a mostrar en la etapa de Guillermo como estudiante, cuando nunca aceptaba que los profesores le dijeran lo que hacía mal o le dieran cualquier tipo de reprimenda por mal comportamiento.

Esta situación se habría acabado trasladando al día a día del Príncipe Guillermo, que se acostumbró a tratar muy mal a todos aquellos que lo rodeaban. Algo que Carlos III consideró absolutamente insostenible. Pues, iba a acabar destrozando por completo su imagen de cara al público, en caso de mostrar de forma continuada ese mal comportamiento. Lo que llevó al actual Rey de Inglaterra a contratar a los mejores psicólogos de Reino Unido para tratar a su hijo mayor.

Guillermo

En Buckingham nadie soporta a Guillermo

La realidad es que con el paso del tiempo, no han sido pocas, las personas que han sufrido el mal carácter de Guillermo de Gales. Y es que a pesar del tratamiento, el Príncipe de Gales sigue siendo incapaz de tratar bien a aquellas personas que lo rodean. Tanto es así, que según fuentes cercanas, no son pocos los que aseguran que el problema de Guillermo va más allá de lo superficial. De hecho, algunos hablan de un problema crónico que lo lleva a estresarse y a enfadarse con suma facilidad.

Así pues, por mucho que sea el nivel del equipo de psicólogos que han tratado al Príncipe Guillermo a lo largo de los años, en Buckingham siguen viendo como el hijo de Carlos III sigue con un comportamiento muy lejano al que debería tener una figura tan importante como lo es el Príncipe de Gales.