Carlos III no sigue las indicaciones médicas y avisan al Príncipe Guillermo de su trágico final

Si Carlos III no comienza a cambiar sus costumbres, su final será inevitable

Carlos III no sigue las indicaciones médicas y avisan al Príncipe Guillermo de su trágico final

Hace tiempo que en Buckingham han asumido que va a ser muy difícil que Carlos III pueda salir adelante. Los efectos del cáncer están comenzando a causar estragos en el cuerpo del Rey de Inglaterra, que sigue sin responder a ninguno de los tratamientos a los que se ha ido sometiendo desde que el año pasado fuera diagnosticado. Esta situación, sin embargo, parece que está desesperando más al entorno de Carlos III que al propio monarca inglés, que siempre ha estado decidido a seguir adelante con su papel al frente de la Casa Real de Gran Bretaña.

En este sentido, tal y como se han encargado de desvelar, fuentes cercanas a Buckingham, no hay ninguna posibilidad de que Carlos III dé un paso al lado en favor de su hijo. El Rey de Inglaterra quiere ser como su madre y estar siempre al pie del cañón. No le importa que su salud salga gravemente perjudicada, él quiere ejercer sus funciones sean cuales sean las consecuencias.

Carlos III

El Príncipe Guillermo ya espera lo peor

La realidad es que el hecho de que Carlos III se niegue a seguir ninguna de las instrucciones médicas que le den, ha hecho que los médicos tengan muy poco que hacer, más allá de seguir recetando medicamentos que, hasta ahora, no han tenido efecto alguno en el organismo de Carlos III. Pues, mientras no guarde reposo ni permita tratamientos a largo plazo que le obliguen a estar internado, todo va a seguir igual.

De todo esto, Guillermo de Gales ya está más que enterado. El Príncipe de Gales es consciente de que su padre no quiere dar ni un solo paso al lado y que está listo para morir siendo Rey de Inglaterra. Un fallecimiento que, de la misma forma, va a acabar llegando antes de lo esperado por culpa de la decisión de Carlos III de seguir al frente pase lo que pase.

De este modo, a pesar de que se ha tratado de convencer a Carlos III de todas las formas posibles. El Rey de Inglaterra no va a cambiar de opinión y, a pesar de que le quite años de vida, va a seguir al frente de la Casa Real de Gran Bretaña.