Casa Real tiene pánico a las atrocidades que Iñaki Urdangarin vivió en Washington con la infanta Cristina
Fue en Estados Unidos, donde la crisis entre Iñaki y Cristina llegó a su punto álgido
Si bien es cierto que el divorcio entre Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina se consumó de forma definitiva el mes de enero del año 2024, la realidad es que su matrimonio, rara vez pasaba por momentos de tranquilidad y estabilidad. Las malas costumbres del que fuera Duque de Palma provocaron que las discusiones en la pareja fueran constantes y que el personal de mantenimiento tuviera que firmar un contrato de confidencialidad para evitar que se revelara ningún tipo de secreto respecto de las peleas entre Iñaki y Cristina, las cuales escandalizaron a la Casa Real.
Unas airadas decisiones que llegaron a su punto más crítico durante la estancia de los Duques de Palma en Washington, lugar al que se refugiaron ante el aluvión de críticas que recibían en España. Sin embargo, fue en la capital de Estados Unidos donde el matrimonio entre la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin llegó al límite por culpa de las constates infidelidades del Duque de Palma que llegó a mantener conversaciones tan subidas de tono que contenían algunas citas como “firma el Duque empalmado” u “Hola, pedazo de mujer”. Entre otros mensajes irreproducibles.
Cristina recibió presionas para que se divorciara
Ante esta situación, Juan Carlos I fue el primero en pedir a su hija que se separara de un Iñaki Urdangarin que, entre las acusaciones de corrupción y su vida extramatrimonial se había convertido en un elemento más que odiado en el seno de la Casa Real, donde detestaban profundamente al que fuera Duque de Palma. Su carácter prepotente y sus constantes faltas de respeto a todo lo relacionado con Zarzuela provocaron que Juan Carlos I odiara profundamente a su yerno.
Sin embargo, sin saber muy bien por qué, la infanta Cristina siempre defendió a capa y espada a su marido, un Iñaki Urdangarin que tenía entre la espada y la pared a su mujer, a la que podía acusar de muchas cosas, en caso de divorciarse. Una situación que desató el pánico, tanto en Casa Real como en una infanta Cristina que, por ese motivo, no se divorció hasta 2024.
Peleas que escandalizaron al personal de limpieza
La realidad es que las peleas entre Iñaki y Cristina llegaron a un punto absolutamente crítico en el que los gritos y las acusaciones provocaron que el personal de limpieza tratar de ponerse en contacto con Casa Real para advertir de las atrocidades que veían en una casa en la que cada día se sobrepasaba una línea nueva.
Así pues, de salir a la luz todo lo que pasó a lo largo de la estancia de los Duques de Palma en Washington, la Casa Real española necesitaría un profundo lavado de imagen ante la crisis que provocaría.