El equipo médico de Zarzuela traslada a sus hijos que las pruebas médicas de la reina Sofía no son buenas

El futuro de la Reina Sofía será parecido al de Juan Carlos I

El equipo médico de Zarzuela traslada a sus hijos que las pruebas médicas de la reina Sofía no son buenas

En Zarzuela las malas noticias no solamente tienen que ver con Juan Carlos I. En este sentido, a pesar de que el estado de salud del emérito es verdaderamente preocupante, la realidad es que los médicos de Zarzuela ya han transmitido a Felipe VI y al resto de la familia, que la evolución de la Reina Sofía también está muy lejos de ser la ideal. Y es que el empeoramiento de la esposa de la esposa de Juan Carlos I va más allá de lo mental, si no que físicamente también.

Según han revelado fuentes cercanas a la Casa Real, Sofía hace meses que ha comenzado a tener serios problemas para levantarse y moverse con un mínimo de facilidad. Por culpa de los problemas de circulación en las piernas de la emérita, esta habría comenzado a dejar de caminar por culpa de los intensos dolores que sufre cada vez que se intenta poner de pie.

A raíz de estas dificultades para llevar una vida normal, no habrían sido pocas las pruebas que el equipo médico ha ido realizando a una Reina Sofía que ha acabado recibiendo las peores noticias posibles. Y es que se han hecho realidad los peores presagios. Si nada cambia, Sofía podría acabar, como Juan Carlos I, postrada en una silla de ruedas de por vida. Algo que podría suponer un golpe definitivo en la ya debilitada estabilidad psicológica de la Reina Sofía.

Sofia

El cirujano es la única alternativa

Ante este complicado diagnóstico, los médicos a cargo de Sofía ya han hecho saber a la emérita y a todo su entorno, que lo mejor para evitar que acabe en silla de ruedas, es que pase por el quirófano para tratar esos problemas de circulación que están haciendo tanto daño en el día a día de la emérita.

Sin embargo, según hemos podido saber, Sofía teme las consecuencias de tener que pasar por el cirujano a sus 86 años. Es por este motivo que se habría comenzado a plantear la posibilidad de optar por un tratamiento conservador basado en el uso de cierta medicación. Un plan que no ofrece tantas garantías a los médicos.

Así pues, en Zarzuela ya son conscientes de que la Reina Sofía se encuentra en un punto crítico de su vida. Por culpa de los problemas de circulación la emérita no es capaz de hacer vida normal y podría acabar en silla de ruedas.