Felipe VI deja plantada a Letizia y su familia después de la cena de Nochebuena
El monarca se desplazará al Palacio de la Zarzuela para asistir a la Misa del Gallo junto a su madre y a su tía.
La tradicional cena de Nochebuena en la Familia Real dejará este año un sabor amargo, marcado por tensiones internas y decisiones que parecen evidenciar una fractura en el matrimonio de los Reyes de España. Según fuentes cercanas a la Casa Real, el rey Felipe VI ha optado por dividir su noche en dos compromisos separados, dejando entrever que las relaciones entre él y la reina Letizia podrían estar más deterioradas de lo que aparentan.
De acuerdo con los detalles que han trascendido, la cena de Nochebuena se llevará a cabo en el Pabellón de los Príncipes, la residencia oficial de los Reyes, donde Felipe VI compartirá mesa con Letizia y su familia. Sin embargo, lo que ha generado más atención es que, tras el fin de la cena, el monarca se desplazará al Palacio de la Zarzuela para asistir a la Misa del Gallo junto a su madre, la reina emérita Sofía, y su tía, la princesa Irene de Grecia, conocida cariñosamente como “la tía Pecu”.
Este gesto ha sido interpretado por muchos como un desplante hacia la reina Letizia y su familia, quienes esperaban compartir con él toda la velada. Para algunos observadores, esta decisión refleja un distanciamiento que va más allá de las obligaciones protocolares y apunta a problemas más profundos dentro del matrimonio real.
Letizia y Felipe VI se alejan mientras Sofía comparte más con su hijo
Las tensiones en la pareja real no son un tema nuevo. Desde hace años, se han multiplicado los rumores sobre diferencias irreconciliables y una convivencia que muchos describen como meramente protocolaria. Fuentes cercanas al entorno de la Zarzuela sostienen que la relación entre Felipe y Letizia se ha convertido en una farsa bien calculada para preservar las apariencias de cara al público, un escenario que recuerda inevitablemente al matrimonio de los reyes eméritos, Juan Carlos y Sofía.
La reciente dinámica también ha puesto en evidencia cómo Felipe VI intenta mantener una cercanía con su madre, a pesar de los escándalos que han sacudido a la Familia Real en los últimos años. La reina emérita Sofía, junto con su hermana Irene, ha encontrado en estas celebraciones navideñas un espacio para reivindicar su papel dentro de la institución, algo que Felipe parece apoyar abiertamente.
Por su parte, Letizia ha intentado mantener una imagen de unidad familiar, pero los hechos de esta Nochebuena han avivado las especulaciones sobre el estado real de su matrimonio. Las decisiones de Felipe VI y la falta de sintonía entre ambos podrían estar marcando un antes y un después en su relación, sobre todo considerando el desgaste que supone una vida bajo el escrutinio constante de la opinión pública.
La Misa del Gallo, un gesto cargado de significado
La decisión de Felipe VI de asistir a la Misa del Gallo con su madre y la tía Pecu, en lugar de permanecer con Letizia y sus familiares, ha sido interpretada como un gesto simbólico. Por un lado, refuerza su conexión con la familia real tradicional y su compromiso con la tradición católica. Por otro, evidencia un distanciamiento emocional respecto a su núcleo familiar inmediato.
La reina Letizia, por su parte, ha optado por mantener el silencio y seguir cumpliendo con su agenda oficial, como es habitual. Sin embargo, su círculo cercano no ha ocultado su malestar por lo que consideran un menosprecio hacia su familia.