Felipe VI mueve contactos al más alto nivel para que no encuentre trabajo en España
Felipe VI hará todo lo posible para mantenerlo en Abu Dabi con Juan Carlos I
Abu Dabi se ha convertido en el lugar ideal para que Felipe VI mantenga lejos de Zarzuela a todos esos elementos disonantes con capacidad para entorpecer su mandato como Rey de España. En este sentido, después de obligar a Juan Carlos I, a exiliarse en la capital de Emiratos Árabes, Felipe consideró conveniente, castigar también a Froilán, ya que venía siendo un problema recurrente para la Casa Real, donde tenían que hacer auténticos malabares para encubrir todas sus salidas de tono por culpa de su costumbre de salir de fiesta habitualmente.
Ante esta situación, Froilán nunca opuso resistencia alguna al hecho de mudarse a Abu Dabi, donde sabe que siempre vivirá a cuerpo de rey, mientras su abuelo, Juan Carlos I esté de su lado. Y es que, además de haber buscado un trabajo con una remuneración de 7.500 euros al mes, el emérito no ha dejado de dar dinero a su nieto, al que cuida como si fuera un hijo y por el que siente absoluta devoción.
Sin embargo, quien no siente ni un punto de devoción por Froilán, es Felipe VI, que es plenamente consciente de las visitas que hace su sobrino a España. El Rey sabe que entre los planes de Froilán está el volver a su país, algo que no gusta nada a su tío, un Felipe VI que ya ha comenzado a mover hilo y contactos para evitar que su regreso sea una realidad.
Felipe VI ha prohibido contratar a Froilán
Así pues, el plan de Felipe VI pasa por evitar a toda costa que Froilán tenga una excusa para volver a España antes de que Juan Carlos I fallezca. De este modo, la única alternativa para que no pueda prohibir la vuelta de su sobrino es que encuentre un trabajo en España, algo en lo que Felipe VI ya se habría puesto a trabajar. Y es que, el Rey habría usado todo su poder y todos sus contactos para evitar, a toda costa, que cualquier empresa contrate a Froilán.
Y es que, el monarca español teme con toda su alma el posible regreso del hijo de la infanta Elena, que ya regresó durante el mes de diciembre y acabó, como siempre, metido en mil y un problemas por culpa de una fiesta en la que él y sus amigos perdieron el control y acabaron implicados en una trifulca en un famoso local nocturno de Madrid.