Froilán y Victoria Federica, beneficiarios de un palacio en el centro de Madrid
Jaime de Marichalar dejará una suculenta herencia para sus dos hijos
Cuando llegue su momento, las herencias van a generar un auténtico terremoto en el seno de Zarzuela. En este sentido, no estamos hablando solamente los 1.800 millones de euros de patrimonio que atesora Juan Carlos I y que va a dejar a todos sus familias, a excepción de Felipe VI. Si no que también hay que tener en cuenta la gran fortuna que va a dejar Jaime de Marichalar, que, gracias a todos sus negocios, ha conseguido crear una fortuna valorada en varios cientos de millones de euros entre dinero en su cuenta y otros elementos de su patrimonio.
En este mismo sentido, tal y como hemos podido saber, Froilán y Victoria Federica saben que nunca van a tener que sufrir por el dinero. Y es que, más allá de lo que les vaya a tocar por el testamento de Juan Carlos I, ya esperan la joya de la corona del patrimonio de su padre. Un palacio ubicado en el centro de Madrid que está valorado en varios millones de euros y que tendrán que compartir los dos hermanos.
Jaime de Marichalar siempre ha sabido que su apellido y su posición social dentro de la aristocracia merecía que residiera en un lugar solamente al alcance de los más privilegiados. Es por este motivo que se instaló en un pequeño palacio ubicado en la milla de oro de Madrid. Y es que el que fuera Duque de Lugo sabía que merecía vivir en un lugar tan privilegiado como en el que vive actualmente.
Las peleas por las herencias pueden ser feroces
A pesar de que hay dinero y bienes de sobra para todos, en Zarzuela hay cierto temor por culpa de las disputas internas a la hora de repartirse los bienes de quienes vayan dejando este mundo. Y es que, cuando estamos hablando de este tipo de fortunas, siempre hay lugar a las envidias y a los intentos de engaño. Lo que podría provocar un enfrentamiento entre Froilán y su hermana, Victoria Federica.
Así pues, la herencia de Jaime de Marichalar podría convertir a sus dos hijos en personas especialmente privilegiadas gracias a un palacio ubicado en pleno centro de Madrid que, una vez el exduque de Lugo fallezca, acabará en manos de Froilán y Victoria Federica.