Juan Carlos I está en tratamiento por una enfermedad que solo conoce la familia y los más allegados

Don Juan Carlos está devastado por estar en silla de ruedas

Juan Carlos I está en tratamiento por una enfermedad que solo conoce la familia y los más allegados

En Zarzuela son plenamente conscientes de que Juan Carlos I se encuentra en un momento absolutamente crítico de su vida. El emérito está siendo incapaz de recuperar la movilidad en sus piernas, lo que ha provocado que el equipo médico encargado de velar por su salud haya dado ese tratamiento como un caso absolutamente perdido. Asumiendo así, que lo único que les queda es trabajar para evitar que Don Juan Carlos siga sufriendo esos intensos dolores que lo han llevado a recibir pinchazos de calmantes durante casi cada día.

Ante esta delicada situación, Juan Carlos I ha entrado en una vorágine muy peligrosa. El emérito se siente derrotado y sin apoyo alguno. Una realidad que ha hecho que el emérito haya caído en una profunda depresión. Algo que no se ha comunicado de forma oficial y que, a priori, solamente debía conocer la familia. Pues, desde Zarzuela no se quiere transmitir una imagen de un rey derrotado.

Juan Carlos

Juan Carlos I echa de menos su antigua vida

La realidad es que lo que más duele a Juan Carlos I, es el hecho de saber que ya no va a poder disfrutar nunca más de su vida como la conocía hasta ahora. Cuando estaba en plenas facultades, el emérito tenía una vida llena de lujos, mujeres, ocio y de su vida en España. Sin embargo, ahora que está postrado en una silla de ruedas ya sabe que no va a poder volver a hacer nada de lo que le ha gustado siempre.

Es por esta situación, que el padre de Felipe VI se encuentra sumido en una profunda depresión agravada por el hecho de que no puede volver a España para pasar sus últimos tiempos. Y es que, a pesar de que viviendo en Abu Dabi ha evitado problemas con Hacienda, la realidad es que el emérito es tremendamente infeliz en los Emiratos Árabes.

Así pues, desde Zarzuela se están esforzando mucho a la hora de esconder los problemas de salud mental de Juan Carlos I. Y es que el emérito se encuentra sumido en una grave depresión ocasionada por el fortísimo bajón que ha sufrido a nivel físico y que lo ha dejado sin movilidad alguna.