La infanta Cristina es reprendida por su hermano para poner fin a la mala vida que lleva en Madrid y Ginebra
Miguel Urdangarin se comienza a parecer demasiado a Froilán de Marichalar

En Zarzuela se están comenzando a acostumbrar a que sus integrantes más jóvenes no trabajen y sean un foco de problemas. Después de los problemas constante saque trajo, en su momento, Froilán y del dolor de cabeza en el que se ha convertido Victoria Federica, ahora Felipe VI ha encontrado a un nuevo Borbón cuya única intención parece que es la de vivir la vida loca y la de no dar ni un solo palo al agua. Estamos hablando de Miguel Urdangarin, que tras acabar su carrera universitaria parece más centrado en la fiesta de Madrid y Ginebra que en buscar trabajo.
Tal y como han revelado fuentes cercanas a Zarzuela, Felipe VI está cansado de recibir llamadas advirtiendo de que su sobrino Miguel ha sido visto en condiciones poco óptimas, por la noche de Madrid o en Ginebra. Una situación que habría llevado al Rey de España a reprender a su hermana, la infanta Cristina por las pobres actitudes de Miguel Urdangarin, al que hay que atar en corto.
Según hemos podido saber, Miguel se ha comenzado a juntar con un grupo de jóvenes ricos de Madrid, que frecuenta varios de los locales más exclusivos de todo Madrid y de Ginebra. Unos lugares en los que ya no es raro que acaben siendo expulsados por culpa de su mal comportamiento y participación en reyertas que han llegado a requerir la intervención policial.
Felipe VI no quiere otro caso como Froilán
La realidad es que en Zarzuela nadie quiere que Miguel acabe eligiendo el mal camino. El hijo de la infanta Cristina parecía ser el nieto mejor encaminado de Juan Carlos I. Sin embargo, tras acabar la carrera, Miguel Urdangarin no ha considerado oportuno el hecho de ponerse a buscar trabajo. Lo que lo habría acabado llevando a preferir la fiesta de jueves a domingo, antes que buscar trabajo de forma activa o hacer algo de provecho con su vida.
Así pues, como tiene unos ingresos asegurados gracias a su abuelo, Miguel Urdangarin puede permitirse vivir sin pensar en trabajar y hacerlo mientras sale noche sí, noche también. Una actitud poco decorosa que ya le ha costado más de un disgusto a la infanta Cristina, que ha sido reprendida por su hermano, Felipe VI.