La reina Sofía lleva 40 años siendo adicta
La adicción se Sofía lleva más de cuatro décadas, ha gastado millones de euros
La reina Sofía ha sido descrita como una "adicta a las compras" por la periodista Pilar Eyre, quien reveló que esta adicción arraigó desde 1975. A lo largo de los años, la emérita ha gastado miles de euros en compras compulsivas, especialmente durante sus estancias en Mallorca.
Según fuentes cercanas, la reina emérita lleva más de cuatro décadas entregada a esta pasión, gastando millones de euros en ropa, joyas y accesorios de las marcas más exclusivas.
La adicción de la reina Sofía
La emérita siempre se ha caracterizado por su elegancia y discreción, pero detrás de esa imagen se esconde una ferviente amante de la moda y adicta a las compras. Desde que se casó con el rey Juan Carlos, Sofía presuntamente ha acumulado un armario digno de una estrella de Hollywood. Vestidos de alta costura, zapatos exclusivos y joyas de ensueño forman parte de su extenso guardarropa.
La adicción de la reina Sofía a las compras no solo se manifiesta en su gasto considerable, sino también en su comportamiento. Durante sus visitas a grandes almacenes, se le puede ver llenando sus manos de bolsas que contienen ropa, joyas y otros caprichos. Este comportamiento presuntamente ha sido observado tanto por el personal de la Zarzuela como por los paparazzi que la siguen en sus viajes.
Según la periodista, la soledad y la tristeza han sido factores clave en la adicción de la reina Sofía. Después de la abdicación de Juan Carlos I y su exilio a Abu Dabi, la reina emérita se ha sentido más aislada y ha recurrido a las compras como una forma de llenar ese vacío emocional. Sin embargo, este vicio no le proporciona una satisfacción duradera, y rápidamente vuelve a enfrentarse a la realidad de su soledad.
Aunque esta afición de la reina Sofía ha sido un secreto a voces durante años, ahora se ha dado a conocer de la mano de Pilar Eyre y de fuentes cercanas a la familia y a la corona española, lo que ha sorprendido a los seguidores de la familia real. Ante estos señalamientos, como era de esperarse, Casa Real guarda silencio y no se ha pronunciado al respeto.
Una vida marcada por la tristeza
Para muchos la reina Sofía ha sido una figura de resiliencia a lo largo de su vida pública. Sin embargo, detrás de su apariencia serena y su compromiso con la corona, se ocultan muchos desafíos personales que han contribuido a una vida marcada por la tristeza.
Uno de los pilares fundamentales en la vida de la reina Sofía ha sido su hermana, Irene de Grecia. Conocida cariñosamente como "tía Pecu", Irene ha sido una compañera constante y una fuente de apoyo emocional. No obstante, la salud de la hermana de la emérita ha comenzado a deteriorarse, afectando profundamente a Sofía. La enfermedad de su hermana representa una pérdida y una preocupación constante, añadiendo una carga emocional significativa a su vida diaria. Es probable que esta situación le afecte emocionalmente y por ello refugie su tristeza en la adicción a las compras.