Leonor, confinada en Elcano por un problema agravado
La Princesa Leonor está acusando el mismo problema que tuvo su padre, Felipe VI
La vida a bordo del buque escuela Elcano no está siendo especialmente sencilla y agradable para la Princesa Leonor, que en sus primeras semanas en alta mar, ha comenzado a ver que la vida del marinero no es algo para lo que todo el mundo está preparado. Y es que, lejos de poder ejercer sus funciones como una más de la tripulación de Elcano, Leonor ha sido incapaz de salir de su camarote, donde los capataces la han confinado para preservar su salud y evitar que sus problemas pasen a mayores. Pues, los vómitos la han dejado absolutamente incapacitada.
En este sentido, tan fuertes han sido los mareos y vómitos, que, lejos de poder cumplir con su turno de guardia en la madrugada del pasado jueves, la Princesa Leonor se tuvo que quedar en su camarote por culpa de una serie de síntomas que, en alta mar, están más que diagnosticados. Es el conocido como mal del mar, o como lo llaman los expertos médicos, cinetosis, un problema relacionado con el movimiento del barco en alta mar, que acaba provocando mareos y náuseas constantes en aquellos que lo padecen. Un mal, que no es nada extraño en Zarzuela.
Felipe VI ya sabía a lo que se exponía su hija
No pasaron nada desapercibidas las lágrimas del Rey Felipe VI mientras veía como su hija mayor se despedía de él y de Letizia mientras el buque Elcano zarpaba. Un momento emotivo en el que el Rey no solo lloraba por el hecho de que su hija estaría lejos de él durante un mínimo de seis meses, sino porque el propio Felipe VI ya probó en sus propias carnes lo complicada que es la vida en alta mar, donde también sufrió ese mal del mar, el cual está haciendo que los primeros días de Leonor estén siendo especialmente complicados.
La realidad es que los capitanes del buque escuela Elcano son muy conscientes de que no pueden someter al mismo nivel de exigencia a la Princesa Leonor que al resto de tripulantes y estudiantes de la embarcación, los cuales, ni en sus mejores sueños podrían ausentarse de su turno de guardia nocturna por culpa de unos mareos o náuseas. Unos síntomas que en alta mar están más que normalizados.
Así pues, apenas comenzar su travesía por el océano, la Princesa Leonor ya ha sufrido el primer percance a bordo del buque Elcano, donde por culpa de un ataque de cinetosis, que ha llevado a Leonor a sufrir importantes mareos y vómitos durante su primera aventura en alta mar.