Leonor necesitó atención médica la madrugada del miércoles al jueves por un suceso grave en Elcano
Leonor lleva muy mal la gestión de las emociones ante la adversidad

La aventura de Leonor a través del océano Atlántico a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano. Una travesía por alta mar que ha hecho que la Princesa de Asturias haya pasado varias de las peores semanas de su vida. Por culpa de los mares y otros problemas de salud, la hija de los Reyes de España ha sido incapaz de disfrutar de una aventura en la que ha pasado más tiempo encerrada en su camarote que junto al resto de sus compañeros. Una situación que ha vuelto a agravarse en estos últimos días.
Según han revelado fuentes cercanas a la Armada aseguran que la pasada madrugada fue una de las más duras que se recuerda en Elcano. Como es más que habitual en cada vez que zarpa, Elcano debe enfrentarse a tormentas y marejadas especialmente fuertes que hacen que la embarcación sufra un vaivén constante y una serie de movimientos que complican la vida de los guardiamarinas. En especial de Leonor.
Como ya contamos en Don Balón, Leonor carece de cualquier tipo de experiencia a bordo de una embarcación. Por culpa de las manías de Letizia, la hija de los Reyes de España no pudo acudir a las regatas anuales en el club de vela de Mallorca. Una situación que ha hecho que Leonor no se pudiera foguear a la hora de navegar y de gestionar las dificultades propias de la vida en alta mar.
Leonor sufre por las inclemencias climáticas
Dada la inexperiencia de Leonor, cada vez que Elcano debe enfrentarse a algún temporal o problema climático, la Princesa de Asturias sufre más de lo que debería. Tanto es así, que como pasó la pasada madrugada, la hija de los Reyes de España ha sido incapaz de estar junto a sus compañeros. Pues, como ya se ha convertido en algo habitual, volvió a mostrar síntomas de ansiedad y mareos cuando el buque comenzó a moverse de lado a lado por culpa de las inclemencias del clima.
Así pues, Leonor ha sufrido mucho a lo largo de su travesía por alta mar, por culpa de las complicaciones del clima, que ha hecho que la Princesa de Asturias se muestre con graves dificultades a la hora de gestionar las emociones y otros problemas como los mareos y vómitos.