Leonor tiene una habitación privada en Elcano en la que pasa horas con su ligue
Leonor, de nuevo en el foco mediático por una sorprendente revelación

La noticia ha sacudido los medios en plena madrugada. La princesa Leonor, heredera al trono español, ha sido vista besándose con un joven durante una fiesta en Salvador de Bahía, Brasil. Así lo desveló el programa TardeAR, que asegura tener imágenes de la joven disfrutando del carnaval en compañía de un misterioso chico.
Según los colaboradores del programa, las fotos fueron tomadas por un periodista que cubría el evento sin saber que la princesa estaba allí. Fue después, al revisar el material, cuando se dio cuenta de la identidad de una de las protagonistas. Poco después, cinco escoltas se abalanzaron sobre él para requisar la cámara. Le pidieron borrar todo. Incluso, lo amenazaron con romperle el equipo. A pesar de eso, logró conservar algunas imágenes en las que se ve a Leonor con su supuesto nuevo amor.
El joven en cuestión sería un guardiamarina del buque escuela Juan Sebastián Elcano, donde Leonor está realizando parte de su formación. Y según cuentan, la princesa tendría una habitación privada a bordo del barco. Un lugar donde, siempre según la versión del programa, pasaría largas horas en compañía de su ligue.
Casa Real se pronuncia y niega rotundamente
Las reacciones no han tardado. Fuentes cercanas a la Casa Real han desmentido por completo la historia. Hablan de "indignación total" por la difusión de unos hechos que califican como falsos. También han mostrado su malestar por las acusaciones que implican a los escoltas de la heredera, sugiriendo que su comportamiento fue poco ético.
Mientras tanto, las redes arden entre quienes celebran que Leonor viva su juventud como cualquier otra chica, y quienes creen que todo forma parte de un montaje mediático. Por ahora, lo cierto es que no hay imágenes claras del supuesto beso. Solo rumores, declaraciones contradictorias y un nombre que vuelve a estar en boca de todos: Leonor. Y si algo ha quedado claro, es que Leonor ya no es una niña, sino una joven que empieza a vivir sus propias experiencias, lejos del estricto protocolo.
Su vida privada, hasta ahora muy protegida, empieza a despertar tanto interés como su papel institucional como futura reina de España.