Letizia fue quien filtró a periodistas las prácticas ilícitas que terminaron con Iñaki Urdangarin en prisión
Nuevas fuentes señalan a Letizia como clave en las filtraciones del caso Nóos que llevaron a prisión a Iñaki Urdangarin.
En un giro inesperado, nuevas fuentes han apuntado a la reina Letizia como el personaje principal en las filtraciones que revelaron el caso Nóos, el escándalo que concluyó con la sentencia de Iñaki Urdangarin, exmarido de la infanta Cristina.
Según estas versiones, la elección de Letizia habría sido impulsada por su inquietud por la imagen de la corona. Cuando la reina había comprendido que las acciones de Urdangarin constituían un peligro directo para la institución monárquica, habría optado por actuar de forma discreta pero decisiva.
La acusación que sacude a Zarzuela
De acuerdo con la periodista Maica Vasco, Letizia habría jugado un papel crucial en las revelaciones del caso Nóos, lo que conllevó a Iñaki Urdangarin tras las rejas. La información, que se supone que Letizia proporcionó a periodistas de confianza, contenía pormenores exactos acerca de las anomalías financieras asociadas al Instituto Nóos. Estas evidencias, unidas a la indagación judicial, resultaron en el proceso judicial y la condena de Iñaki Urdangarin en el año 2018.
El caso Nóos, que explotó en público en 2010, se transformó en uno de los escándalos más grandes que han perturbado a la Casa Real de España. Con Urdangarin y la infanta Cristina como protagonistas de las denuncias, la monarquía sufrió años de análisis mediático y jurídico que disminuyeron su reconocimiento. En este escenario, la posibilidad de que Letizia haya divulgado datos con el fin de salvaguardar la institución divide puntos de vista.
Por una parte, existen personas que sostienen que la reina actuó de forma pragmática, dando prioridad a la supervivencia de la corona por encima de los vínculos familiares. Bajo este punto de vista, las acciones de Letizia podrían entenderse como un esfuerzo por proteger el porvenir de la monarquía, en particular el de sus hijas Leonor y Sofía, que simbolizan la perdurabilidad de la institución, mientras que algunos críticos y analistas consideran esta presunta filtración como un ajuste de cuentas. El vínculo entre Letizia y la infanta Cristina siempre ha estado distanciado, caracterizado por discrepancias personales y de perspectiva respecto al papel de la monarquía en el siglo XXI.
Las consecuencias familiares y públicas
Si esta versión llega a confirmarse, las consecuencias para la dinámica familiar en Zarzuela serían significativas. Los conflictos entre Letizia y las hermanas de Felipe VI, Cristina y Elena, ya se mostraban claros mucho antes de la crisis de Nóos. Este episodio reciente podría intensificar las divisiones internas en una época en que la monarquía busca proyectar una percepción de unidad y cambio.
Además, el efecto en la percepción pública no sería menos significativo. A pesar de que algunos podrían valorar la resolución de Letizia de salvaguardar la institución, otros podrían poner en duda la moral que subyace a las filtraciones y el rol que una figura como la reina debe tener en temas de este tipo.
Por el momento, Letizia ha mantenido un silencio total ante estas denuncias, siguiendo su tradición de no participar en discusiones públicas. No obstante, su personaje vuelve a ser el foco del debate en los medios, añadiendo un nuevo episodio a las intrincadas relaciones internas de la familia real.