Letizia se encierra en lavabos por ataques de pánico
Los viajes hacen que Letizia tenga que esconderse para fumar en secreto

Desde que llegó a Zarzuela de la mano de Felipe VI, Letizia se ha esforzado en mostrar una imagen meticulosamente calculada para parecer una mujer que no tiene nada que esconder y con unas formas y costumbres impolutas. Sin embargo, cualquier parecido de esa imagen con la realidad es absolutamente falsa y construida de forma interesada. Pues, tal y como han revelado todas las personas que han convivido con Letizia en Zarzuela, la esposa de Felipe VI es como cualquier persona y tiene, como todos, sus puntos débiles y guarda más de un vicio. En especial el tabaco, una mala costumbre que sigue siendo incapaz de abandonar por completo.
A pesar de haberse vendido como una persona antitabaco, la realidad es que Letizia sigue necesitando la nicotina para tranquilizarse en los momentos de máxima tensión. En este sentido, por muchos actos que lleve ya a sus espaldas, la consorte se sigue poniendo sumamente nerviosa cada vez que viaja al extranjero o cuando debe presidir algún acto oficial. Una serie de situaciones que llevan a Letizia a sufrir ataques de pánico de forma más habitual de lo que desearía.
Por lo que hemos podido saber, cada vez que Letizia sufre un ataque de nervios o de pánico antes de aparecer públicamente, necesita encerrarse en un baño para ponerse a fumar un cigarrillo para así bajar las pulsaciones y recuperar la compostura. Una costumbre que le ha servido desde que llegó a la posición de Reina de España, cuando los nervios comenzaron a afectar de verdad a la esposa de Felipe VI.
Letizia es incapaz de dejar el tabaco
Cabe destacar que el consumo de tabaco no es algo raro en el día a día de la Reina Letizia. A pesar de su imagen de persona antitabaco, la consorte sigue consumiendo tabaco de forma relativamente habitual dentro de Zarzuela, donde los trabajadores ya no se sorprenden cuando ven a la Reina con un cigarrillo en la mano. Algo que, está prohibido que trascienda o que se filtre.
Así pues, por mucho que se haya esforzado en dar una imagen de ser una mujer recta y sin imperfecciones, la realidad es que Letizia sigue necesitando del tabaco para poder comparecer públicamente de forma óptima después de superar los ataques de pánico que sufre cada vez que debe viajar o presidir un acto.