Letizia tiene una tía muerta de forma prematura de la que está prohibido hablar en la familia

La reina Letizia ha enfrentado pérdidas significativas, desde la muerte de su hermana Erika hasta el fallecimiento de sus abuelos.

Letizia tiene una tía muerta de forma prematura de la que está prohibido hablar en la familia

La existencia de la reina Letizia se ha caracterizado por fluctuaciones, tanto en el plano personal como en el escenario público. Desde que se unió a la monarquía, ha procurado conservar una imagen discreta, resguardando su vida privada y la de su familia.

No obstante, las adversidades que han afectado a los Ortiz Rocasolano no han sido inadvertidas. El fallecimiento de su hermana Erika Ortiz en 2007 significó un cambio radical en su existencia, dejando a Carla Vigo, hija de Erika, sin su progenitor. Sin embargo, esta pérdida no fue la única que impactó de manera significativa a Letizia.

El impacto de la pérdida de su abuela Menchu

Una de las situaciones más complicadas en la vida de Letizia fue la muerte de su abuela Menchu del Valle, con la que mantenía una relación especial. Menchu no solo se destacó en su vida personal, sino también en su ámbito laboral. Conocida por su sobresaliente trayectoria en el ámbito de la radio, laboró por más de cuarenta años, dejando un legado que motivó tanto a su hijo Jesús Ortiz como a su nieta Letizia.

Paloma Rocasolano

Menchu obtuvo reconocimientos significativos como la Antena de Oro y el Premio Nacional de Radio, estableciéndose como una de las personalidades más impactantes en el campo de la comunicación. Su deceso dejó un hueco complicado de cubrir en la familia Ortiz Rocasolano, en particular en Letizia, quien siempre halló en su abuela un respaldo sin reservas y un manantial de sabiduría.

Otras tragedias familiares: una lucha constante

La familia Ortiz Rocasolano ha sufrido numerosas pérdidas a través del tiempo. El fallecimiento anticipado de Cristina, hermana de Jesús Ortiz, representó otro severo impacto. Cristina, la madrina del bautismo de Letizia, murió después de un duro combate contra el cáncer, dejando una marcada huella en su familia.

Además, el abuelo de Letizia, José Luis Ortiz, también experimentó las repercusiones de esta enfermedad. José Luis, diagnosticado con cáncer en una etapa avanzada, afrontó con coraje los tratamientos, aunque desafortunadamente no logró vencer a la enfermedad. Su muerte tuvo lugar en 2005, dejando un legado de fortaleza y unidad familiar. En los años finales de la vida de sus abuelos, Letizia y Felipe frecuentemente viajaron a Asturias para estar con ellos, en particular a su hogar en el pueblo de Sárdeu, próximo a Ribadesella.

Letizia

Estas vivencias han moldeado la personalidad de Letizia, quien ha logrado manejar las dificultades mientras cumple su función como reina de España. A pesar de que los medios frecuentemente se enfocan en su personaje famoso, tras las cámaras se halla una mujer marcada por el sufrimiento y las enseñanzas que la vida le ha otorgado.

Las pérdidas en su familia no solo han consolidado su vínculo con los demás, sino que también han otorgado humanidad a su imagen frente a la opinión pública. Pese a los obstáculos, Letizia ha mostrado tenacidad y un compromiso inalterable con aquellos que la rodean, tanto en su vida personal como en sus obligaciones como reina.