Meghan Markle y Enrique de Sussex en crisis por las broncas y faltas de respeto mutuas
El matrimonio de los Duques de Sussex no pasa por su mejor momento

No es ninguna novedad que los matrimonios formados en Buckingham vayan mal. El primero en romperse fue Carlos III y Lady Diana, pero la realidad es que ni Kate Middleton y Guillermo de Gales ni Meghan Markle y el Príncipe Enrique están siguiendo un camino especialmente alegre en sus vidas matrimoniales. La vida en Buckingham es ciertamente complicada y está llena de dolores de cabeza y de problemas internos que rara vez salen a la luz. Hecho que ha acabado haciendo mella en la vida matrimonial de los hijos de Carlos III.
En este sentido, a pesar de que se alejaron de Buckingham con la intención de tener una vida mucho más tranquila y menos marcada por los conflictos propios de la Casa Real, Meghan Markle y el Príncipe Enrique siguen atravesando crisis matrimoniales de forma casi periódica. Y es que el hecho de vivir a más de 10.000 km de Reino Unido no hace que les dejen de salpicar las polémicas surgidas en Buckingham.
De este modo, lejos de salvarse de las inclemencias de formar parte de la Casa Real, los Duques de Sussex han visto como por el hecho de estar enfrentados a los Windsor, está, todavía más si cabe, en el ojo del huracán y en el foco de toda polémica. Especialmente ahora que se sabe que la salud de Carlos III está en un punto crítico.
El regreso de Enrique genera conflictos
Según han revelado fuentes de Estados Unidos, no se respira un ambiente especialmente agradable en la mansión de Montecito. Los rumores que dicen que el Príncipe Enrique quiere volver a su hogar han comenzado a afectar seriamente a la vida familiar. A Meghan Markle no le hace ninguna gracia que su marido se plantee abandonarla a ella y a sus hijos para satisfacer el último deseo de Carlos III.
Es por esta razón que ya no es sorprendente que se escuchen gritos, insultos y otras faltas de respeto en las estancias de la mansión en la que viven Meghan y Enrique. Pues, cada vez que se ponen a hablar sobre el tema, la actriz acaba perdiendo los papeles.
Así pues, a raíz del estado crítico de Carlos III, Meghan Markle y el Príncipe Enrique no dejan de pelear y de discutir. Lo que ha convertido la vida matrimonial de ambos, en un auténtico infierno.