Miguel Urdangarin no es bienvenido, le pidieron de forma educada que no volviera, está en la calle
Su madre, la Infanta Crisitina está en Londres, le preocupa la situación de sus hijos.
Miguel Urdangarin, hijo de la infanta Cristina de Borbón y el ex duque de Palma, Iñaki Urdangarin, se encuentra en una situación complicada tras todo lo que ha vivido últimamente. Después de haber estudiado Biología Marina en una prestigiosa universidad británica, Miguel se enfrentó a un revés significativo en su carrera profesional que ha dejado una marca en su reputación.
El hijo de la infanta culminó sus estudios e inició un trabajo como becario que no terminó bien. Según se rumorea, la empresa no quedó satisfecha con su dedicación, y tras finalizar las prácticas, no fue contratado, prefiriendo un perfil más apto para el puesto. Le cerraron las puertas y esto marcó su vida profesional.
Miguel está la calle y vive de la "caridad" de su abuelo Juan Carlos I
La frustración le habría alejado de la profesión que estudió con dedicación. De ahí que decidiera formarse como profesor de esquí, pero, para sumar a su desgracia, sufrió una lesión que lo obligó a desistir de la idea. Posterior a esto, llega Zarzuela para tomarse un año sabático, donde fue puesto en tela de juicio su actuar y terminó siendo explusado del palacio. Ahora vive en Londres nuevamente, pero según algunos portales, está en la calle, es decir sin trabajo.
Al no tener un empleo, su abuelo ha asumido los gastos del joven. Recientemente, fue noticia que Miguel vive sin problemas económicos y a todo lujo gracias a Juan Carlos I, quien, supuestamente, le adjudica a su nieto unos 10 mil euros al mes para sus gastos. Ante esta realidad, el hijo de Iñaki Urdangarin parece no verse en la necesidad de buscar algo productivo que hacer para darle norte a su vida.
Cristina está preocupada
Recientemente se ha sabido que la infanta Cristina está en Londres. El móvil de su viaje a la ciudad sería la preocupación que siente por sus hijos Juan e Irene. Juan no ha estado bien emocionalmente en mucho tiempo, ha sido a quien más le afectó todo lo vivido producto de la encarcelación de su padre. Pese a tener un trabajo estable, el pasado le persigue y enfrenta aún consecuencias psicológicas. Irene, por su parte, está siendo un dolor de cabeza desde hace mucho, y Londres no ha sido la excepción. Fiestas descontroladas, problemas en la universidad por sus acciones y bajo rendimiento académico, son algunas de las razones que mantienen en vela a la hija de Sofía.
Esto es lo que se ha dicho, pero, parece acertado apuntar a que, Cristina también estaría también angustiada por la situación de Miguel. A su edad, toda madre esperaría que su hijo esté esforzándose por construir un futuro, y al joven esto no parece interesarle por ahora. La Infanta, quizás, se esté tomando las fechas navideñas para poner todo su empeño en ayudar a sus hijos a encaminarse y tener un norte más claro en la vida.