Paloma Rocasolano, muy preocupada por el verdadero estado de salud de Letizia, viaja de urgencia a Madrid

Paloma Rocasolano, madre de la reina Letizia, viajó a Madrid para acompañar a su hija Letizia en uno de los momentos más complicados de su vida. A pesar de que al principio se creía que el propósito del viaje era disfrutar del puente familiar, la situación es mucho más alarmante: Letizia atraviesa una crisis emocional caracterizada por el estrés y la ansiedad, tal y como lo señala la revista portuguesa Lux.

Letizia está experimentando una circunstancia extrema que ha empezado a impactar no solo en su estado emocional, sino también en su bienestar físico. Las tensiones acumuladas en los últimos meses, junto con las dificultades familiares, están pasando factura. Paloma Rocasolano, al tener en cuenta la seriedad de la situación, ha optado por ofrecer su respaldo incondicional, como lo ha hecho en múltiples ocasiones.

La pérdida de control sobre Leonor: un desencadenante

Uno de los aspectos que más impacta a Letizia es la percepción de que está perdiendo el control sobre su hija mayor, la princesa Leonor. Según relatan fuentes próximas, la joven ha empezado a tomar decisiones sin antes consultar a su madre, lo que ha provocado conflictos en el seno de la familia. Este reto a la autoridad de Letizia ha representado un impacto emocional que ha favorecido la degradación de su salud.

La reina, habituada a mantener un control detallado sobre todas las facetas de su existencia, se encuentra ahora ante una circunstancia en la que percibe que sus riendas se le van. El vínculo con Leonor, en lugar de ser suave, se ha vuelto tenso, lo que ha agravado la angustia de Letizia. La persistente inquietud por la dirección que está siguiendo su hija ha llevado a episodios de insomnio y ataques de depresión que preocupan a su ambiente cercano.

El impacto en la salud y el aislamiento en Zarzuela

La condición emocional de Letizia no es reciente. Hace unos años, ya experimentó una crisis que la condujo a dejar de consumir alimentos y a adelgazar de forma alarmante. En aquel instante, su madre estuvo a su lado y la apoyó para que lograra salir adelante. Actualmente, parece que la situación se repite, pero con un agravante: Letizia se percibe aislada en la familia verdadera.

En Zarzuela, su vínculo con otros integrantes de la Casa Real es escaso, lo cual la deja casi sin respaldos en el ambiente del rey Felipe VI. Este aislamiento emocional ha agravado su condición de desaliento. Letizia está en una situación de vulnerabilidad, siendo su único sostén firme su madre, Paloma Rocasolano. La madre de Letizia arribó a Madrid para ser ese soporte esencial que su hija necesita en estos momentos tan complicados.

Con el paso del tiempo, ha probado ser su refugio en períodos de crisis. Actualmente, más que nunca, su presencia es esencial para asistir a la reina a hallar la estabilidad emocional que tanto requiere. El principal objetivo es que Letizia obtenga el respaldo apropiado y pueda comenzar un proceso de rehabilitación, todo con la finalidad de que pueda superar esta etapa complicada.