Ainhoa Armentia rechaza casarse con Iñaki Urdangarin en Vitoria

Iñaki y Ainhoa no quieren perder los beneficios que sacó del divorcio

Ainhoa Armentia rechaza casarse con Iñaki Urdangarin en Vitoria

Iñaki Urdangarin siempre tuvo claro que después de pasar más de cinco años entre rejas sin revelar ninguno de los secretos que se esconden en Zarzuela, iba a sacar gran provecho de su posición de poder delante de los Borbón. Esta situación llevó al que fuera Duque de Palma a jurar venganza y a luchar con uñas y dientes por sacar hasta el último céntimo de los bolsillos de Juan Carlos I y de la infanta Cristina. Un dinero que logró asegurarse, pero que acabó atando a Iñaki Urdangarin a ligarse a un acuerdo de divorcio que ahora coarta su vida.

En este sentido, según han revelado fuentes cercanas a Iñaki Urdangarin, el exduque de Palma sueña con poder casarse con Ainhoa Armentia y formar una nueva familia con sus cuatro hijos y los dos jóvenes que también tiene la abogada. Sin embargo, por fuerte que sea el deseo de Iñaki de casarse, hay una cláusula en el acuerdo de divorcio firmado ahora hace un año, no permite que Urdangarin se vuelva a casar.

Ni Ainhoa ni Iñaki Urdangarin dejarán escapar sus lujos

La realidad es que gracias a los más de 25.000 euros mensuales que la infanta Cristina ingresa a su exmarido, Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia han sido capaces de comenzar a tener una vida de pareja llena de lujos, mientras viven en una de las mejores urbanizaciones Vitoria. Una serie de privilegios que ninguno de los dos quiere dejar de disfrutar, lo que ha llevado a Iñaki y a Ainhoa a buscar alternativas para su boda.

Iñaki

Ainhoa acepta casarse en secreto

Según hemos podido saber, la principal alternativa que manejan Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia no es otra que la de casarse lejos de España para realizar una celebración modesta y sin grandes alardes. Todo con la intención de evitar molestar a la infanta Cristina y así lograr casarse sin perder por el camino una pensión que los ha llevado a vivir como si fueran miembros de la Casa Real.

Así pues, Ainhoa Armentia e Iñaki Urdangarin planean una boda secreta ubicada lejos de España para así lograr su cometido de formar matrimonio y de paso no perder ni un euro de la pensión que Urdangarin pactó con la infanta Cristina.