Carlos III vive recluido en su casa por culpa de un empeoramiento que amenaza su vida

La salud de Carlos III no le permite viajar hasta Roma

Carlos III vive recluido en su casa por culpa de un empeoramiento que amenaza su vida

Carlos III ha tomado la decisión de no viajar hasta Roma para dar un último adiós al Papa Francisco. En este sentido, es el Príncipe Guillermo, el que, junto a su esposa Kate Middleton ha tomado un vuelo hacia Italia para representar a la Casa Real de Gran Bretaña en el multitudinario funeral que servirá para que todas las grandes instituciones del mundo puedan despedirse por última vez del Papa Francisco, que falleció el pasado lunes de forma inesperada. Una noticia que ocasionó un auténtico terremoto a nivel mundial.

Ante esta situación, desde la Casa Real de Gran Bretaña no tardaron en asegurar su presencia en un acto en el que era imposible que no acudiera un representante importante de Buckingham. Sin embargo, a diferencia de lo que muchos hubieran imaginado, Carlos III no ha viajado hasta Roma, sino que es su hijo y sucesor, el Príncipe Guillermo, el que ha tomado un vuelo directo hasta la capital italiana.

Guillermo

La salud de Carlos III entra en un punto crítico

La realidad es que después de presidir la misa de Pascua en el palacio de Windsor, Carlos III está especialmente cansado y necesitado de descanso. Lo que ha provocado que, junto al equipo médico de Buckingham se haya tomado la decisión de mantener encerrado al Rey de Inglaterra, con el que no se quiere correr ni un solo riesgo. De este modo, por orden directa del equipo médico, ha sido Guillermo el que ha tenido que ejercer de representante en Roma.

La decisión de mantener a Carlos III encerrado en su hogar ha dejado muy claro que el estado de salud del Rey de Inglaterra es verdaderamente crítico. Y es que como ya revelaron desde Inglaterra, en el último viaje oficial de Carlos III, el monarca inglés tuvo que viajar acompañado de un largo equipo médico que tuvo que estar muy pendiente de la evolución de Carlos III.

Así pues, para evitar problemas con la salud del Rey de Inglaterra, desde Buckingham han tomado la decisión de enviar a Guillermo de Gales al funeral del Papa Francisco. Un plan que va orientado a preservar la salud de Carlos III y evitar asumir riesgos innecesarios.