El Príncipe Harry amenaza con contar toda la verdad si Carlos III no cede
El Duque de Sussex quiere seguir teniendo seguridad privada

Cuando en el año 2020, el Príncipe Harry y Meghan Markle tomaron la decisión de abandonar su puesto como Duques de Sussex, para comenzar una nueva vida en Estados Unidos sin cumplir ni una de sus obligaciones como miembros de la Casa Real de Gran Bretaña. Una situación que, de forma implícita, obligaba a que tanto Harry como Meghan perdieran también, la gran mayoría de los beneficios que comportaba el hecho de que fueran miembros de la Realeza. Algo que Carlos III está decidido a hacer que se cumpla, a expensas de los deseos del Príncipe Harry.
Tal y como han revelado fuentes cercanas a Buckingham, el principal requisito que pide Harry, a la hora de aceptar el regreso a Reino Unido, es el de contar con seguridad privada a su plena disposición durante su estancia. Una petición a la cual ni Carlos III ni el gobierno de Inglaterra se plantea aceptar, lo que ha provocado que Harry inicie una batalla legal contra su país y contra su familia.
En este mismo sentido, todo apunta a que el juicio que ha iniciado el Príncipe Harry para recuperar su derecho a contar con seguridad privada se va a enquistar durante unos cuantos meses. Sin embargo, en Buckingham no ven como un problema el hecho de que se alargue su batalla legal, sino que lo ven en la posibilidad de que pueda llegar a revelar los secretos mejor guardados en la Casa Real de Gran Bretaña.
El Príncipe Harry ya ha amenazado con tirar de la manta
Tal y como han adelantado medios especializados en Inglaterra, el Príncipe Harry ya habría hecho saber a su padre, que podría salir a revelar varios de los peores secretos de Buckingham si no le devuelven su seguridad privada. Una amenaza que podría obligar a Carlos III a ceder ante las peticiones de su hijo, que conoce todo lo que en la Casa Real de Gran Bretaña llevan décadas escondiendo.
Así pues, la batalla legal entre el Duque de Sussex y el Gobierno de Reino Unido ha entrado en una nueva dimensión. Y es que, ya ha jugado su mejor carta, la de revelar los peores secretos de la Casa Real de Gran Bretaña. Algo que no hará ninguna gracia a Carlos III.