El rey ordenó rescatar a Letizia por causar un accidente bebida

Hoy en día, Letizia ha sido capaz de forjarse la imagen de ser una mujer especialmente fuerte y ajena a cualquier tipo de mal hábito. En este sentido, desde que llegó al trono de España, la esposa de Felipe VI siempre se ha vendido como una persona absolutamente abstemia y con un estilo de vida especialmente sano. Sin embargo, la realidad es que la consorte nunca ha sido así. De hecho siempre fue todo lo contrario, en su juventud era la última en abandonar los locales de fiesta que frecuentaba y disfrutaba como nadie del consumo de alcohol. Algo que le acabó costando más de un disgusto.

A pesar de que no sea algo especialmente bien visto, no es ningún delito que Letizia saliera de fiesta y acabara la noche en circunstancias, cuanto menos indecorosas. Sin embargo, lo que sí que acabó afectando de verdad a Letizia y pudo causar más de un problema para Zarzuela, fue el episodio en el que protagonizó un accidente de noche mientras conducía bajo los efectos del alcohol.

Según reveló el que fuera jefe de informativos de Televisión Española, Alfredo Urdaci, cuando estaba comprometida con Felipe VI, Letizia protagonizó un fuerte accidente de tráfico mientras circulaba por la M-30 en Madrid. Sin embargo, el problema no fue el choque en sí, sino que estaba bajo los efectos del alcohol y que pudo haberle acabado costando la vida, ya que circulaba a alta velocidad.

Felipe VI ordenó tapar el escándalo

A pesar de que se ha acabado sabiendo, la realidad es que el accidente de Letizia nunca se acabó haciendo público. Felipe VI y todo Zarzuela, movieron todos los hilos necesarios para evitar que trascendiera el hecho de que la pareja del entonces Príncipe de Asturias se dedicaba a conducir borracha y que era un peligro público. Y es que tal y como le confirmaron los expertos sanitarios, Letizia acabó la noche, “viva de milagro”.

Así pues, en Zarzuela tuvieron muy claro que Letizia arrastraba serios problemas con el consumo de alcohol cuando protagonizó un aparatoso accidente de tráfico que pudo haberle acabado costando la vida. Algo que tuvo que ser silenciado por parte del Rey de España, que no quería grandes escándalos relacionados con la que en ese entonces era la Princesa de Asturias.