Jaime de Marichalar ha estado pidiendo precio especial en los hoteles porque no tenía dinero para pagar

El ictus de Jaime de Marichalar marcó un giro radical en la familia

Jaime de Marichalar ha estado pidiendo precio especial en los hoteles porque no tenía dinero para pagar

El divorcio entre la infanta Elena y Jaime de Marichalar se produjo meses después de que el que fuera Duque de Lugo sufriera un ictus que lo dejó muy mermado en cuanto a su salud. En este sentido, más allá de las evidentes secuelas físicas y mentales en Jaime de Marichalar, su matrimonio con la hija mayor de Juan Carlos I tuvo que enfrentarse a uno de los momentos más delicados de su vida por culpa de la falta de dinero. Y es que, durante su paso por Estados Unidos, donde Marichalar se recuperó del ictus, el dinero no era algo que le sobrara.

Ante esta situación, tal y como ha revelado Pilar Eyre, los gastos derivados del proceso de recuperación de Jaime de Marichalar acabaron pasando una seria factura en la economía de los que fueran Duques de Lugo. Y es que durante su estancia en un hotel de Nueva York, Marichalar tuvo que pedir un precio especial porque no tenía dinero para pagar la habitación.

Esta realidad parece contraria a la naturaleza de alguien como Jaime de Marichalar, que siempre había tenido el dinero por castigo. Sin embargo, en esos tiempos, no contaba con una fortuna tan grande como la que tiene hoy en día. De este modo, durante su breve paso por la Gran Manzana, Jaime de Marichalar se quedó sin fondos y sin poder pagarse ni un hotel de calidad media.

MArichalar

Elena no soportó el cambio de Jaime de Marichalar

Además de la falta de dinero, la infanta Elena tuvo que hacer frente a una situación realmente complicada con su marido. Según Pilar Eyre, el carácter de Jaime de Marichalar cambió radicalmente a raíz del ictus. El que fuera Duque de Palma pasó a ser un hombre mucho más agresivo y con un carácter muy complicado. Algo que generó un gran rechazo en la infanta Elena, que acabó divorciada y completamente alejada y aislada del que fuera su marido.

Así pues, por culpa de los gastos derivados de los problemas de salud de Jaime de Marichalar, el matrimonio de la infanta Elena se quedó sin fondos. Lo que los obligó a pedir ayuda en un hotel de Nueva York.