Letizia intentó operar la cara de Leonor para que no se parezca a su abuelo, Juan Carlos I

Letizia, como madre y reina consorte de España, siempre ha estado al tanto de la imagen pública de su familia. En este sentido, la figura de la princesa Leonor, quien se prepara para ser la futura reina, no ha sido ajena a la preocupación de la reina. A pesar de que la joven Leonor está conquistando corazones tanto en España como en el extranjero, Letizia ha mostrado inquietud por ciertos detalles físicos heredados, como la forma de la nariz de su hija, que recuerda a la de su abuelo, el rey Juan Carlos I. En este contexto, se ha especulado que la reina habría sugerido a Leonor someterse a una rinoplastia al llegar a la mayoría de edad, un procedimiento que ella misma se realizó años atrás para mejorar su respiración y, en parte, por razones estéticas.

Sin embargo, este consejo de Letizia no fue bien recibido por la princesa Leonor. Aunque la joven es consciente de su imagen, ha decidido mantener su aspecto natural, rechazando la idea de someterse a una cirugía estética. En lugar de seguir los pasos de su madre, Leonor ha optado por preservar los rasgos que la vinculan a su familia, incluida la nariz que tanto se comenta en los medios. En un mundo donde la apariencia juega un papel crucial, la postura de Leonor ha sido aplaudida por quienes valoran la autenticidad y el respeto por los rasgos heredados.

El reto de Letizia: el parecido con Juan Carlos I

El rostro de Leonor, en particular su nariz, ha generado comparaciones con su abuelo, el rey Juan Carlos I. Para Letizia, este parecido podría ser un inconveniente en el camino hacia la consolidación de la figura de su hija como futura reina. A lo largo de los años, Letizia ha sido cuidadosa con su propia imagen y la de su hija. De hecho, se ha conocido que la reina también pasó por un proceso quirúrgico para cambiar ciertos aspectos de su rostro, como la nariz, para mejorar tanto su respiración como su estética personal. Este detalle no es menor, ya que Letizia quiere asegurarse de que su hija, la futura monarca, esté lo mejor preparada posible para los retos públicos que enfrentará.

A pesar de la presión por parte de Letizia, la princesa Leonor ha demostrado ser firme en su decisión de no seguir las recomendaciones estéticas de su madre. Esta actitud refleja una mayor independencia y una personalidad más fuerte, que parece prepararla para los desafíos de la realeza.