Alonso y Vettel tienen 3 enemigos por un asiento de campeón en 2023

El campeonato de Fórmula 1 ya se encuentra en el ecuador del desafío y, aunque todavía quedan muchas cosas por esclarecerse en los doce compromisos que restan por disputarse, hay varios pilotos y escuderías que ya están prestando mucha atención a 2023, especialmente Fernando Alonso y Sebastian Vettel. Dos de los tres pilotos más veteranos de la parrilla tienen serias dudas sobre qué decisiones de futuro tomar, el asturiano porque Alpine ha faltado a su palabra sobre brindarle un coche competitivo, y el alemán porque tiene en mente retirarse a final de curso, aunque todavía no es una decisión definitiva.

Entre todo este mar de dudas, McLaren ha hecho su aparición en escena para dejar claro que no cuenta con Daniel Ricciardo en 2023. A pesar de que el australiano tiene contrato y de que quiere permanecer en el equipo para cumplir su compromiso, la marca británica ha abierto el casting para suceder al oceánico, cuyas prestaciones esta temporada están resultando muy por debajo de lo esperado.

Según ha revelado Crash, aparte de los mencionados Alonso y Vettel, el equipo tiene en nómina a Oscar Piastri (piloto reserva de Alpine), Alexander Albon y Colton Herta, un hombre sumamente experimentado en la Indy Car que podría dar el gran salto a la categoría reina de las cuatro ruedas en 2023, aunque la competencia no es vana a tenor del laureado palmarés del español y del teutón.

Por el momento, McLaren ya ha brindado una posibilidad que hace escasas semanas no estaba abierta dado que tanto Norris como Ricciardo tienen contrato con el equipo en 2023, y Alonso aquí ha descubierto una vía exprés para dejar definitivamente Alpine, protagonizar el gran bombazo del año y soñar con poder hacer algo grande con el equipo, a pesar de que el monoplaza naranja tampoco está cumpliendo con las expectativas esta temporada.

Con Ferrari, Red Bull y Mercedes teniendo sus asientos ocupados y afianzados para 2023, solamente la escudería británica podrá brindarle a Alonso un coche ganador con el que intentar poner en apuros a los equipos dominantes, es decir, a los tres mencionados unas líneas más arriba.