La decisión que puede cambiar radicalmente el mundial de Fórmula 1

El asunto que va a marcar la presente temporada de la Fórmula 1 es un elemento del coche de Red Bull sobre el que se han colocado todos los focos: su alerón trasero y la flexibilidad de este. El problema viene arrastrándose desde el inicio del campeonato pero la FIA ha tomado una decisión final ahora y el cambio será a la fuerza.

En Red Bull molesta la denuncia pública e insistente que vienen haciendo desde la escudería británica y es que sienten que cada vez que logran estar cerca de Hamilton algo cambia en la Fórmula 1 que lo trastoca todo, volviendo a aumentar las distancias entre ambos equipos y teniendo que empezar casi desde el punto de partida.

La FIA ya ha confirmado que, a partir del Gran Premio de Francia, (domingo 20 de junio) los test con los que se chequean los alerones serán más exhaustivos, lo que provocará que los de Red Bull tengan que ser modificados sí o sí para reducir su excesiva flexibilidad. En el conjunto austriaco han calculado que ese cambio supondrá un gasto de cerca de medio millón de euros, una cantidad muy importante en tiempos de recortes y donde todas las escuderías tienen un techo presupuestario al que ceñirse. Tendrán que ingeniárselas para no superar el techo de gasto sin renunciar a mejoras importantes este año.

A Christian Horner, el director de Red Bull Racing, le preocupa la rapidez con la que la FIA responde siempre a las quejas y llamamientos de Mercedes. En cuanto Lewis Hamilton alza la voz, el máximo organismo automovilístico se moviliza para escuchar y atender sus peticiones. Desde Mercedes se insiste en que el alerón no cumplía con la normativa y que, por tanto, han hecho lo correcto para la pureza de la competición.

Por lo pronto, mañana se dará una de las carreras más características de la F1, el GP de Mónaco, tras un año de ausencia a consecuencia del COVID-19 y se podrá volver a ver cuanto de cerca está Red Bull de Mercedes con el presente alerón antes de que este sea modificado.