Sainz lo dice claro en Ferrari y calienta el duelo Leclerc-Verstappen
El piloto español desvela una de sus grandes preocupaciones en la temporada
Es fin de semana de Fórmula 1 y en la jornada matutina de este viernes, 20 de mayo, se han realizado los primeros entrenamientos libres correspondientes al Gran Premio de Barcelona. Este compromiso no solo servirá para aclarar si las novedades introducidas por Mercedes en el W13 permitirá a Lewis Hamilton y George Russell pelear por los puestos de cabeza, sino que Max Verstappen tendrá una oportunidad de oro para recortar distancias con Charles Leclerc en la apasionante lucha dual que mantienen ambos desde que la primera carrera del año.
No obstante, precisamente en Ferrari se ha producido otra novedad, pero a cargo de Carlos Sainz. El piloto madrileño y actual quinto clasificado en la tabla, ha revelado en los prolegómenos del GP de Barcelona la gran preocupación que tiene de cara al futuro de la temporada, la cual no afecta solo a la escudería de Maranello, sino a todos los equipos que integran la parrilla: el problema de la marsopa.
La nueva normativa técnica vigente introducida para el desarrollo del presente Mundial ha obligado a todas las escuderías a aprovechar el efecto suelo que permite a los monoplazas rodar unas décimas más rápido. Eso sí, aunque aparentemente las marsopas aumentan la diversión ya que los pilotos tienen que estar mucho más concentrados para no cometer errores que pueda ser fatales y a llevar medidas de seguridad tan fiables como incómodas, esta novedad también conlleva consecuencias secundarias, el tambaleo del automóvil.
Mercedes es el equipo que más problemas está sufriendo este año a raíz de esto, pero es Carlos Sainz el que ha ido más allá. El piloto español, sin pelos en la lengua, ha querido poner de manifiesto las consecuencias de futuro que podría conllevar esto, problemas que tiene que ver con la salud: "Creo que las regulaciones son geniales, están haciendo exactamente lo que necesitamos para las carreras, pero ¿necesitamos correr tan rígidos para el cuello y la espalda como tenemos que correr últimamente con esta masa de autos? Para mí, es más una pregunta filosófica que planteé para la F1 y para que todos reconsideren cuánto necesita pagar el piloto un precio en su carrera con su salud para combatirlo. Estoy pensando más a largo plazo".
Así pues, si ya Ferrari tendrá muchas miradas puestas encima este domingo, las palabras de Sainz derivarán mucho más protagonismo a Leclerc, que tendrá que verse las caras con un Verstappen que llega a Montmeló con la moral por las nubes.