Jorge Lorenzo cierra un fichaje estrella para callar a Casey Stoner

Toda la carne en el asador. Las orejas de Jorge Lorenzo pitan de día y de noche. Ducati ha cerrado el año con Dovizioso luchando por el Mundial hasta la última carrera a pesar de ser el segundo piloto del equipo, a años luz en sueldo -4 millones de ‘Dovi’ por los 12 ‘kilos’ que cobra Jorge- del fichaje estrella de la marca italiana, Lorenzo, que debía abrir un nuevo ciclo triunfal en Ducati. No fue así.

El año de Jorge ha sido de risa, de ridículo único, convirtiendo al piloto en el hazmerreír de MotoGP. Una realidad que no ha pasado por alto en Ducati, donde avisan con un ultimátum alto y claro al español.

"Claramente, no podemos estar contentos de la temporada 2017 de Lorenzo. El primero en no estarlo es él mismo. Teníamos una idea diferente sobre cómo se desarrollaría el Mundial de Lorenzo. Si hago un razonamiento a posteriori, el paso de una moto como la Yamaha a una Ducati es complicado para uno que sólo llevó la Yamaha. Hay dificultades objetivas para entender los nuevos puntos fuertes y débiles de la moto. Desde mitad de año, el progreso ha sido muy positivo. Tanto que en las últimas ha podido luchar por la victoria. Pero estoy confiado con el futuro de Lorenzo con la Ducati. Tenemos dos pilotos en óptima forma. Los dos podrán optar el año próximo a resultados importantes", espeta Gigi dall'Igna, jefe técnico de Ducati.

Con el agua al cuello, Lorenzo juega un último as: fichar a Álex Debón para que ejerza de coach y lo saque del atolladero.

El ex piloto, campeón de 250cc, y de 41 años, acompañará a Jorge durante el próximo Mundial con la idea de corregir fallos y adaptar su pilotaje al de la Ducati. Un milagro que algunos dar por imposible. Y es que las voces que apunta que los días de Lorenzo en Ducati están contados son mayoría.