Marc Márquez va con todo a por Valentino Rossi: sin rencor, sin piedad

Marc Márquez está de vuelta. Al menos esa es la sensación que arrojan sus últimos resultados, y así como desde fuera tratamos de situarle ya entre los mejores en ritmo y posibilidades de carrera, como ha sucedido en las tres últimas citas del calendario, el de Cervera es más cauto, aunque optimista. Ayer os contábamos en Don Balón Motor como el ocho veces campeón del mundo veía con mejores ojos este regreso a Misano que hace apenas unas semanas, cuando fue cuarto.

Para él aquella posición fue casi como una victoria. Ganar aquella batalla a Joan Mir y Jack Miller fue un impulso magistral, y no tanto por el hecho en sí de acabar por delante del de Suzuki y Ducati en ese triunvirato de carrera, sino por quedar tan delante cuando nada estaba siendo satisfactorio encima de la moto. El español sufría sobre su Honda, soportaba dolor y no podía soltarse en su conducción al cargar sobre su lado derecho, que le tenía sumamente limitado. Por eso decimos que ha vuelto, porque a pesar de las dificultades, ha sabido responder con otros trucos y argumentos, sacándose de la chistera un nuevo ‘yo’ capaz de luchar por las carreras.

Lo curioso de todo este asunto es que las declaraciones que os mostrábamos ayer del campeón coinciden con las de un Valentino Rossi que espera ser más protagonista en su adiós al trazado de Misano; o lo que es lo mismo, el nuevo Márquez, ese que quiere volver a luchar un Mundial pero a través de su reinvención, condicionada por su merma física y mecánica, tiene una prueba de fuego que quiere superar con nota en el día de la despedida de Il Dottore.

Nadie duda de que si, con Fabio Quartararo jugándose el título, Joan Mir la segunda plaza y sobre todo Francesco Pecco Bagnaia el Mundial, el 93 consigue ganar en territorio hostil en las actuales circunstancias de la competición y con sus déficits, mecánicos y físicos, justo después de haber ganado en el Gran Premio de Las Américas, entonces podremos ya hablar abiertamente del regreso del campeón. Él espera que así sea, aunque no quiere correr; mientras que sus fans desean que este paso hacia adelante ocurra cuanto antes, y si es en ‘territorio Rossi’, mejor. The Doctor no es su rival este fin de semana, pero sí lo fue durante muchos años sobre el asfalto y sobre todo lo es en las páginas de la historia, de modo que este es un gran momento para despegar.