Valentino Rossi vuelve a las motos por Pecco Bagnaia y Márquez por fin confirma uno de sus objetivos

El nueve veces campeón del mundo y su gran enemigo, de nuevo en el foco de Moto GP

Valentino Rossi vuelve a las motos por Pecco Bagnaia y Márquez por fin confirma uno de sus objetivos

Enea Bastianini, de Ducati, decía que la nueva Moto GP le impedía a Marc Márquez luchar por los títulos, una categoría reina mejorada, más veloz, más competitiva, sin embargo la supremacía que demostraron en diferentes épocas, momentos y circunstancias Valentino Rossi y, después de él, el propio piloto de Cervera es un hito que aún no ha regresado al Campeonato del Mundo, de ahí que en busca de un campeón duradero, una leyenda, los ojos viren con recurrencia al 46 y el 93 en cuanto dejan una vía abierta a ello, como es el caso.

Centra parte de su información más reciente el medio de comunicación especializado en Moto GP, Crash, a la gran ganancia, podríamos decir el enorme paso al frente, del ocho veces campeón del mundo. La ha puesto de manifiesto por fin Márquez antes del arranque de Sepang y Portimao, pruebas clave justo en el último tramo antes del regreso del Mundial. Y tiene que ver con su físico, donde nada es comparable a las últimas temporadas.

Básicamente, el campeón de la firma nipona impresionó en su visita al Red Bull Athletes Performance Center de Austria, cuando puso a prueba de una manera crítica su maltrecho brazo. En un momento de estos ensayos extremos, se le dijo “esta es la prueba de fuego”, referida a su brazo derecho, respondiendo Márquez: “es el punto. Este es con el que doy gasolina. ¡Tiene que funcionar!” Después, una vez terminados los esfuerzos, el campeón demostraba y confirmaba a viva voz que se “siente mejor” y busca la “perfección”. Lo cierto es que esta confirmación física no la había tenido en las últimas temporadas, lo cual ya es un paso enorme para él y para Honda.


Rossi, de nuevo sobre dos ruedas

Con sus clásicos colores amarillos y el 46 ondeando, Valentino Rossi volvió a rodar sobre dos ruedas y levantó tanto la expectación como la melancolía de sus más acérrimos seguidores. Lo hizo junto a Francesco Pecco Bagnaia y otros pilotos del VR46 Riders Academy en el circuito de Portimao, con el simple motivo de mantenerse en forma. Fue en sus propias redes sociales donde dejó constancia de su ‘regreso’ a las motos, que, aunque breve y anecdótico, fue para la mayoría delicioso.

 
 
 
 
 
Ver esta publicación en Instagram
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Una publicación compartida de Valentino Rossi (@valeyellow46)