5 claves positivas (sin alardes) de un triunfo extraño ante Chequia
España entra con buen pie pero con dudas en la Eurocopa 2016, ganando a un combinado que se cerró atrás durante todo el encuentro y que puso en apuros a la Roja. Victoria sufrida y mínima.
Hablar de un primer partido ganado por parte de la Selección española en un torneo internacional debería ser una buena noticia. Quizá por eso, quien lea estas líneas con un nivel de exigencia normal o bajo sea crítico, y el que lo haga con un nivel de exigencia que algunos entendemos propio para un equipo doblemente campeón de Europa y campeón del Mundo en los últimos 8 años entienda la sensación agridulce que conllevó la victoria. España nunca había conseguido ganar un encuentro oficial un día 13 de junio. Este lunes lo logramos, sufriendo durante 86 minutos contra el equipo más fácil del grupo y cayendo seriamente en el peligro de comenzar pinchando. Así pues, la conclusión debe ser positiva, y el análisis comedido y hasta algo crítico.
1. Buen juego, sin exagerar... pero sin gol. Vicente del Bosque no dio lugar a las sorpresas y alineó el once titular que se esperaba ante la República Checa: con un De Gea excesivamente sometido a las miradas de todos por sus líos extradeportivos, pero forzosamente ratificado bajo palos para evitar males mayores desde el punto de vista psicológico; Una línea defensiva consolidada con Piqué y Ramos de mariscales y Juanfran y Jordi Alba por los costados. Esa será la menos discutida durante el torneo. Con Busquets de jefe en el medio campo, Iniesta y Silva de 'pensadores' y Cesc conectando con Nolito y Morata, España demostró dos cosas: tiene un poder de control del juego y capacidad de posesión mayor que cualquier selección europea, si acaso igual al de Alemania, pero el mayor problema con el gol de las favoritas. Una y otra vez, España se da de bruces con defensas a las que les basta el orden y un poco de intensidad para sufrir mucho menos de lo esperado. Le pasó con Georgia, y volvió a suceder ante los checos durante casi 90 minutos. Sin plan B, la Roja se ve 'embutida' en una suerte de paredes agoviantes por el centro, buscando la inspiración divina y ahogándose con centros a la nada cada vez que los laterales sorprenden por los costados. Falta un rematador con instinto y Morata es un jugón, pero sin el olfato de los 'Villas' de antaño.
2. Alarmante falta de forma de algunos pesos pesados. La famosa 'transición dulce' anunciada por Vicente del Bosque dio lugar a una alineación, dos años después del fracaso en el Mundial de Brasil, con solo tres cambios reales respecto a la vieja guardia del periodo de éxitos 2008-2012: De Gea, Nolito y Morata. Todos los demás futbolistas, en mayor o menor medida, más o menos merecidamente, son de los importantes, de los que todavía toda Europa se sabe de carrerilla al pensar en la Roja. Ramos, Piqué, Busquets, Iniesta, Silva... esto indica experiencia por un lado, algo positivo, pero poca frescura y sorpresa para los rivales por otro, algo que acaba convirtiéndose en problema cuando hablamos de algunos nombres propios de forma individual. La baja forma de Cesc Fábregas resulta alarmante, algo de lo que Del Bosque pareció darse cuenta en la segunda parte dando entrada a Thiago, uno de los llamados a convertirse en protagonista en esta Eurocopa. Lo mismo sucede con Pedro, un jugador que todavía tiene el papel de agitador cuando se encuentra en un momento complicado de su carrera. Quizá Lucas Vázquez deba ir por delante.
3. Pese a todo, viendo el nivel general de la Euro, conclusiones positivas. Tal y como ya hemos contado, a esta selección le basta algo de ritmo, de velocidad y de interés por hacer lo que hace para ser mejor que muchas, que casi todas sus rivales a día de hoy y en este campeonato. Podremos perder a un partido con bastantes, y quizá estemos ya al mismo nivel o un poco por debajo de Francia o Alemania, pero sin estar en nuestro mejor momento nos da como para ir superando las primeras barreras de una competición que se hace larga, y en la que no solíamos comenzar con buen pie.
4. ¿Por qué este primer partido era más clave que otros primeros encuentros? Croacia y Turquía apuntan a más complicadas que los checos. Especialmente la selección balcánica de Modric y compañía, que nos caerá en el último encuentro del grupo. Y dado que los croatas habían dejado a los turcos con el agua al cuello ganándoles este domingo, vencer a la República Checa se antojaba fundamental. De esta forma, que Turquía venga con todo para intentar ganar el segundo encuentro no preocupa tanto y la posibilidad de llegar al tercer encuentro clasificados y sin agobios crece muchos enteros. Haber pinchado en el teórico partido más fácil del grupo hubiese despertado muchas dudas. Quizá por eso costó también este primer envite. Los nervios cuentan.
5. Margen de mejora, alguna polémica... y paso a 'los otros'. A esta España aún le quedan nombres por sacar a la palestra que pueden mejorar lo presente. Faltó este lunes Lucas Vázquez, faltaron hombres como Koke y se puede echar más mano de Aduriz y Thiago, jugar con dos delanteros, con extremos... la capacidad para voltear los puntos negativos vistos este lunes sigue siendo alta. Y ojo al detalle de Piqué al marcar el tanto de la victoria, pues su cara al 'encararse' con la afición española denota que tenía ganas de demostrar muchas cosas cuando se pone la camiseta de la selección... aunque la duda es si la gente lo entenderá de forma positiva o no.
Video: España 1 - República Checa 0