¡Brutal! ¿Sabes cuánto es capaz de saltar Cristiano Ronaldo?
El futbolista portugués es un portento físico, y una de sus especialidades es esa característica 'suspensión' suya en los remates de cabeza.

Sin duda, una de las imágenes que nos ha dejado la Eurocopa fue ese gol de Cristiano Ronaldo a Gales en las semifinales, con un remate de cabeza imperial tras un salto que dejó con la boca abierta a más de un aficionado. Un tanto marca de la casa de CR7, que de vez en cuando deleita a todos con esa forma descomunal de elevarse sobre los defensas rivales y quedar 'suspendido' en el aire. Es una de sus mejores cualidades, difícilmente igualada por ningún jugador del mundo. Pero, ¿cómo consigue saltar tan alto?
Los compañeros de Defensa Central se hacen eco de un estudio que Castrol, empresa relacionada con el mundo del motor, hizo sobre los saltos de Cristiano Ronaldo a raíz de otro golazo de cabeza del madridista al Manchester United en 2013, un tanto con un salto cuya elevación, potencia y suspensión en el aire fueron también muy comentadas. Para determinar los resultados del estudio se hizo que el portugués realizase dos tipos de saltos, uno con las manos en las caderas y sin impulso con los brazos, y otro con ayuda de los brazos. Los resulados determinaron que el luso puede alcanzar 44 centímetros de altura sin impulsarse con los brazos, mientras que empleando el impulso del tren superior puede alcanzar los 78 centímetros.
En definitiva, Cristiano puede elevarse hasta una altura de 2,63 metros y quedar suspendido en el aire más de lo normal por su físico privilegiado y por la forma en la que arquea las piernas al saltar, características que le colocan por delante en cuanto a capacidad de salto a la mayoría de los jugadores de la NBA, por ejemplo. Toda una cualidad que le convierte en el mejor jugador del mundo en esa faceta, los remates de cabeza. Otro dato brutal resultante del estudio es que la capacidad de su salto es la de cinco veces su peso (5G). Increíble.
A sus 31 años, parece que esta característica de su físico no le ha abandonado. Así como en otras vertientes de su juego se ha visto obligado a evolucionar, como en las jugadas de velocidad y potencia física por banda en las que quizá ya no es tan determinante como hace tres o cuatro temporadas, en el remate ha seguido siendo letal.