Poyet se fabrica su primera gran final (victoria o 'muerte') con el Betis
Pese a la victoria contra Osasuna, el juego del equipo verdiblanco no transmite confianza y de perder contra el Espanyol, el técnico podría tener los días contados
El técnico uruguayo del Betis, Gustavo Poyet, está dispuesto a ‘morir’ con sus ideas o al menos con sus cambios tácticos. El partido contra Osasuna en El Sadar se saldó con victoria, pero su juego dejó muchas dudas por un sistema de juego y no sacar de inicio a Rubén Castro.
Los medios andaluces señalna que los jugadores béticos volvieron a mostrar una imagen pasiva con el balón en los pies y una intensidad discreta que salvó la escasa pegada de la entidad navarra.
Y por este motivo apuntan que el próximo partido contra el Espanyol en el Villamarín apunta a final, después de que no se acaben de entender sus variaciones de sistema. El 4-3-3 dio paso al 4-2-3-1. Una modificación sin un resultado visible en cuanto al juego. Tonny Sanabria, su referencia principal en ataque, no tuvo excesiva suerte ante Osasuna y eso que tuvo en su testa un cabezazo limpio.
Se vislumbra un ‘match ball’ para Poyet, ya que los aficionados esperan ver una mejora susceptible contra el Espanyol de Quique Sánchez Flores o de lo contrario la tormenta volverá a desatarse.