Los comentarios internos (por obligación) sobre Cristiano en el Real Madrid

El mal momento del futbolista portugués es, se quiera o no, el tema de actualidad dentro y fuera de la casa blanca.

Los comentarios internos (por obligación) sobre Cristiano en el Real Madrid

Cristiano Ronaldo está mal. Que la máxima estrella y el jugador bandera del Real Madrid atraviesa su peor momento desde que viste la elástica merengue es un hecho constatable, tanto por números puros y duros como por sensaciones, y es inevitable que el asunto sobre su mala racha, su desesperación y sus gestos tras el choque ante el Athletic de Bilbao en el Bernabéu, el cuarto seguido en el que no ve portería en casa, y el creciente debate sobre la posible pérdida de un Balón de Oro que parecía tener ya en la mano tras conquistar Champions y Eurocopa el pasado curso, se hayan convertido en temas de obligado seguimiento estos días. También dentro del club.

 

Porque dentro del Madrid entienden que dar cancha a estos debates no hace sino fomentar el estado de pánico en torno al futbolista, pero que la situación es tan sumamente anormal (CR7 nunca había estado peor desde que es jugador blanco, ya lo hemos dicho, y quizá tampoco desde que explotó como profesional) que no puede no producir cierta preocupación dentro de la entidad.

 

Ronaldo

 

Preocupación.... contenida, que no miedo. Cuenta el diario MARCA este martes que en el interior del Real Madrid absolutamente todos, desde sus compañeros de vestuario hasta directivos, pasando por el cuerpo técnico, tienen una sola duda acerca del futuro del portugués. Zidane está contento con su evolución física, no tiene problemas graves constatables pese a que no pudo hacer pretemporada después de caer lesionado en la final de la Euro, y a pesar de su edad sigue teniendo fútbol en sus piernas. No se le ha olvidado. El club está convencido de que es una mala racha, aderezada por cierta angustia psicológica que ha aumentado el problema, y que todo pasará. Cerrar filas en torno a su estrella es la actitud.

 

De hecho, y pese a que algunos medios habían sugerido dudas acerca del tema, la hoja de ruta del Real para con Cristiano sigue intacta: su renovación tendrá lugar antes del final del año, será celebrada por todo lo alto en un acto multitudinario en el Bernabéu y al luso le ofrecerán el contrato que se merece, y que él desea obtener hasta el final de su carrera, del cual solo falta discutir alguna diferencia respecto a la duración. Que ahora esté mal, o incluso que en un futuro pueda bajar algo las prestaciones que hasta hace bien poco fueron habituales en él, se toma como un proceso lógico. Sigue siendo el líder, tanto futbolísico como de imagen del proyecto deportivo de la entidad, y es fundamental que se retire vestido de blanco y por la puerta grande, con todos los honores. Esto es lo que siguen teniendo claro dentro del club.