El Parma convierte la competición italiana en un caos
El aplazamiento del partido contra el Génova levanta ampollas. Este viernes podría producirse una salida al vía crucis que vive el equipo
El capitán del Parma, Alessandro Lucarelli, aseguró que acudirían a jugar contra el Génova en el correspondiente partido de la liga italiana, aunque fuese en sus propios coches, mientras los jugadores veían como desmantelaban el vestuario del equipo para poner a subasta sus objetos entre ellos taquillas y bancos.
Al final Lucarelli se desmarcó de la promesa y el Parma, en el enésimo capítulo del vía crucis que atraviesa, se quedó en casa y en la página del club, los jugadores solicitaron un aplazamiento del encuentro ante el Génova. "No vamos a jugar el domingo. Hemos pedido un aplazamiento y si no nos lo dan iremos a la huelga y perderemos por 3-0, al no presentarnos", explicaba.
Del “queremos jugar e iremos a Génova aunque tengamos que pagar nosotros el viaje” se pasó a “o se aplaza o haremos huelga”. El cambio se debió a que “no existen las condiciones para jugar, no estamos en condiciones de jugar. No nos hemos sentido apoyados”, decía Lucarelli a la salida de la ciudad deportiva. También se quejó de la falta de solidaridad de sus compañeros de profesión y desveló que sólo había recibido una llamada, la de De Sanctis, portero de la Roma y ex del Sevilla.
La Federación italiana aceptó la suspensión, pero avisando al conjunto de Reggio Emilia que será la última vez. "Considerando la moral y la situación de la jugadores hemos decidido posponer el encuentro, pero no podemos hacerlo cada domingo", señalaba Carlo Tavecchio, presidente de la Federación.
Este es el segundo partido de Liga que lleva suspendido el Parma, después de que ante el Udinese la pasada temporada se viviese una situación similar, aunque en este caso se cerró el estadio, porque no tenía dinero para asumir los gastos del partido. No hay fecha para disputarlo y son dos ya los encuentros aplazados, al cuarto, el equipo quedará excluido del campeonato.
La sentencia final sobre el futuro del Parma puede llegar este viernes. La Lega Calcio y Federación han organizado una asamblea especial para tratar el caso Parma. Demasiado tarde para los jugadores. “Han decidido reunirse el 6 de marzo, así que vamos a esperar a ver qué hacen y qué deciden”, aseguraba ayer Lucarelli.
La situación del Parma lleva en un camino de no retorno desde finales de enero. El nuevo presidente Giampietro Manenti -el quinto en siete meses- tenía de plazo hasta el 16 de febrero para pagar las nóminas de jugadores y empleados. Dos semanas después sigue aduciendo “problemas técnicos”.
La prensa italiana no se ha cortado en titular respecto al tema del Parma que: “Han destrozado el campeonato”.