Ultimátum de Simeone a la directiva del Atlético por Marco Reus

El Atlético de Madrid no se ha olvidado de Marco Reus. Y no lo hace fundamentalmente por las exigencias del Cholo Simeone acerca de la necesidad de contar con un fichaje 'bomba' que venga a cubrir la baja de Arda Turan, ya jugador del Barcelona desde hace días. Pese a que los rojiblancos han firmado al defensor montenegrino Savic, la ambición del técnico argentino sigue yendo más allá.

Simeone sabe que al equipo no le bastará con tener una gran delantera. Necesita jugadores de refresco que unan el centro del campo con los hombres de arriba, y sin Arda y con Saúl y Koke ocupando posiciones más organizativas, la plantilla tiene que contar con un hombre rápido entre líneas. Óliver Torres ha mejorado mucho tras su cesión al Oporto pero no basta. Hace falta alguien como Reus.

En Don Balón venimos informando del interés del Atlético de Madrid por Reus desde hace mucho tiempo. Los acercamientos de la directiva madrileña para tratar de ficharle, las distintas reuniones y las dificultades de la operación. Sin embargo, el club colchonero tendrá que hacer un esfuerzo para acelerar los plazos después del ultimatum de Simeone: Quiere la plantilla cerrada para el inicio de la gira que llevará al equipo a jugar una serie de amistosos en tierras asiáticas, concretamente en Japón y China, en los primeros días del mes de agosto. Para entonces, tendrá que saber con qué 23-25 jugadores cuenta definitivamente.

Tras la salida de Iker Casillas, Reus es una de las bazas que gesta Florentino Pérez como opción para ilusionar a la afición del Real Madrid y hacer olvidar el mal trago del adiós del ya ex capitán. El Atlético lo sabe y también que el agente del jugador, Volker Struth, sigue escuchando ofertas. La última ha llegado por parte del Liverpool y supera los 30 millones de euros. Habrá que depositar bastante más dinero encima de la mesa para lograr no sólo que el Dortmund acepte, sino que el propio Reus entienda que podrá salir del club de su vida por la puerta grande y sin enfadar a su afición. Pero el momento es ahora, en los próximos diez días.