Cuentan la verdad de Jadon Sancho: Barça y Real Madrid están alerta
El inglés vuelve a ser protagonista
Barça y Real Madrid están avisados, pues ambos tenían a Jadon Sancho en su agenda. Y no es para menos, pues, pese a su temprana edad, apenas 20 años, ya es uno de los mejores jugadores del planeta. Estas dos últimas temporadas ha sido el mejor futbolista del Borussia Dortmund, donde llegó en verano de 2017, y ha tenido un crecimiento bárbaro. Y este verano ya estuvo cerca de irse, al Manchester United, que le ofrecía un dineral.
Pero finalmente se quedó, debido a que en el Signal Iduna Park no tenían intención de dejarle salir. Y tampoco hubo acuerdo económico, ya que no pondrán ningún tipo de facilidad. Sin embargo, lo cierto es que desde hace tiempo que está lejos de su mejor versión, y en poco o nada se parece a ese jugador que asombró a todos con su velocidad, su técnica, su desparpajo, su talento y su facilidad para desequilibrar y romper encuentros.
Lleva un tiempo estancado, concretamente, desde que regresó el futbol tras el parón por el coronavirus. Ya regresó algo pasado de peso, y se le vio con algunos kilos de más, que todavía no ha perdido al completo. Y eso se ve en sus jugadas, pues ya no tiene esa agilidad, y ha visto como, ahora mismo, todas las miradas están puestas en sus compañeros de ataque, tanto Erling Braut Haaland como Giovanni Reyna, que han asumido más galones.
Las estadísticas del internacional inglés han empeorado enormemente. En los ocho encuentros que ha disputado hasta la fecha, tan solo ha visto puerta en dos ocasiones, y ambas, desde el punto de penalti. Eso si, ha dado cuatro pases de gol para sus compañeros. Pero muchos creen que, hoy por hoy, está en un bache del que necesita salir pronto. La realidad es que jugando como lo viene haciendo, no da la talla para militar en un equipo ‘top’.
Barça y Madrid lo saben, y lo tendrán en cuenta. Si Sancho no espabila y mejora pronto, su nombre no aparecerá en las quinielas para verano. El canterano del Manchester City y el Watford tiene trabajo por hacer.
Y no poco.