Jaque mate de Mesut Ozil al proyecto del Bayern: el crack convencido
El jugador alemán provoca la salida de uno de los pilares del equipo
Como ya lleva haciendo varias temporadas, la liga turca se ha establecido como un lugar ideal para que los jugadores de más edad pero que un día fueron de la élite europea pasen los últimos años de su carrera. Una competición con gran rivalidad pero con menor exigencia competitiva. La última gran incorporación a la Superliga fue un ex jugador del Arsenal, gran icono del Real Madrid en su momento, Mesut Ozil, quien llegó libre al Fenerbahce. Ahora, el plan de los otomanos es usar este reciente fichaje como imán para otro futbolista de gran nivel: Jerome Boateng.
La situación del central del Bayern de Múnich está colgando de un hilo. Su contrato termina en junio de este año y la renovación está parada, sin avances. Esta coyuntura está intentando ser aprovechada por varios equipos que ven en el internacional alemán la posibilidad de incorporar a sus filas un central de primer nivel a coste cero, un oasis en plena crisis económica por la pandemia.
El jugador todavía no ha decidido qué es lo que va a hacer, por lo que está dispuesto a escuchar ofertas, y las tiene de todos los colores. Uno de los más sonados en los últimos tiempos era el interés del Chelsea, pues se rumoreaba que Tuchel quería juntarle con Thiago Silva y crear una zaga de garantías. Sin embargo, los deseos reales del técnico pasan por un jugador más joven, que pueda hacer carrera en Londres.
Aprovechando esto, Mesut Ozil, habría llamado a su amigo y compañero de selección para convencerle de la opción turca. El Fenerbahce se encuentra en plena lucha por la liga, y quieren reforzar todavía más su equipo de cara a su vuelta a la Champions, después de que el curso pasado fuera para el olvido.
El jugador tiene 32 años, pero, después del caso Alaba, es una baja importante también para el club bávaro, que los obligará a acudir una vez más al mercado de fichajes para rearmar un proyecto que quieren siga pudiendo pelear por todo. Sus ojos se han depositado para esta labor en Diego Carlos, el central del Sevilla de Lopetegui, pero este culebrón todavía está muy verde.