Lewandowski mira al Barça y Rüdiger arrastra otro del Bayern al Madrid
Pánico en Múnich tras conocerse la última declaración de intenciones de otra de sus estrellas
Robert Lewandowski es el primer jugador que ha puesto en jaque el proyecto del Bayern Múnich en la temporada 22/23. El polaco, que finaliza contrato el 30 de junio del próximo año, quiere salir del equipo este mismo verano para poner rumbo al FC Barcelona, club que lleva preguntando por el delantero varios meses. No obstante, este no es el único contratiempo que podría sufrir Julian Nagelsmann en el próximo mercado veraniego ya que, según ha recogido Goal recientemente, Serge Gnabry quiere jugar en el Real Madrid.
El futoblista alemán ha perdido mucho peso en el equipo desde que Nagelsmann tomó las riendas del Bayern y, dado que finaliza contrato al mismo tiempo que Lewandowski, no quiere desaprovechar la oportunidad de buscar fortuna lejos del Allianz Arena. Al parecer, la relación entre al atacante de 26 años y el actual técnico del equipo no es la más gratificante para sus intereses y de ahí que Gnabry esté abierto a escuchar ofertas.
Cabe señalar que el conjunto bávaro hará todo lo posible para evitar que esta doble fuga se consume, por mucho que sea el deseo ambos jugadores, pero LaLiga podría asestar un doble bombazo que supondría un antes y después en la historia del Bayern, sobre todo por el efecto que tendría el adiós de Lewandowski.
El internacional alemán sabe que, con la llegada de Antonio Rüdiger al Real Madrid y con la presencia de Toni Kroos, su adaptación podría ser mucho más cómoda, aunque por el momento el conjunto blanco no ha mostrado interés en él.
Eso sí, la renovación de Mbappé con el PSG ha dejado al conjunto español sin galáctico veraniego y Florentino Pérez aún sigue agitando el mercado en busca de una pieza que pueda marcar las diferencias la próxima temporada, por lo que el deseo de Gnabry podría saldarse próximamente con su entrada en la agenda blanca.
Además, el hecho de que finalice contrato en 2023 abarata el precio de su traspaso, el cual se cerraría en torno a 40 millones, un condicionante que podría convencer al Real Madrid para presentar una oferta por el germano como refuerzo de lujo para la parcela ofensiva.