¡Nuevo desafío para Kevin-Prince Boateng! En el Barça alucinan

Fue un fichaje 'random' de Bartomeu

¡Nuevo desafío para Kevin-Prince Boateng! En el Barça alucinan

Kevin-Prince Boateng será recordado como uno de los fichajes más raros y aleatorios hechos jamás en el Barça. Como no podía ser de otra manera, lleva el sello de Josep María Bartomeu, que le incorporó como cedido, pues andaba en busca de un delantero centro capaz de suplir a Luis Suárez. Y, de todas las opciones que tenía en ese momento, se decantó por el germano-ghanés, pues era muy sencilla. Y tampoco tenía un coste elevado.

De hecho, es que llegó como cedido, y prometió aceptar un rol como suplente. Al final, acabó jugando más de lo que se esperaba, si bien tampoco fue demasiado, y dejó claro que sus mejores años eran cosa del pasado. Porque a nadie se le escapa que llegó siendo ya muy veterano, y en la fase final de su carrera. Además, lo que extrañó a todos fue el hecho de que quisieran colocarle como ariete. Una demarcación en la que ha jugado poco a lo largo de su carrera.

Leo Messi se quedó a cuadros después de escuchar que lo tenían atado, y, a pesar de que intentó vetar su llegada, era demasiado tarde. Por suerte, lo que sí pudo hacer fue enviarle de vuelta al Sassuolo, al que pertenecían sus derechos federativos, solo unos meses después de todo. Desde entonces, el hermano de Jerôme Boateng no ha levantado cabeza, y su carrera ha trazado una curva claramente descendente. Porque se fue a la Fiorentina, también, en la Serie A.

Medio año duró el ex de Tottenham Hotspur, Borussia Dortmund o AC Milan, previo a su aventura por el Besiktas turco, en el que probó suerte, sin éxito. Y de allí, recaló en el Monza, de la Serie B, y del que Silvio Berlusconi es el propietario. Ha tenido un buen año, pero no han conseguido el objetivo del ascenso, motivo por el que ha rescindido su contrato. Y Boateng ha regresado a sus orígenes, concretamente, a la Bundesliga. A sus 34 años, tendrá una última experiencia en el Hertha de Berlín.

Boateng

Probablemente, sea ya su último gran contrato en la élite.

En el Camp Nou aún se acuerdan de él.