P. Pogba
Si existe alguien en el mundo del fútbol bendecido con un físico imponente para jugar en una posición ideal, ése sin duda es el caso de Paul Labile Pogba (Lagny-Sur-Marne, 15 marzo 1993). Paul Pogba, de ascendencia guineana pero francés de nacimiento, es un absoluto tanque en el centro del campo. Envergadura, colocación, resistencia en el aspecto defensivo y un disparo absolutamente letal en el plano ofensivo hacen de él un centrocampista todoterreno y una de las joyas de este deporte.
Tras jugar 7 temporadas en el US Torcy, a los 15 acabó en un club ya profesional como Le Havre. Sin embargo, fue en 2009 cuando Paul Pogba vivió uno de los episodios más surrealistas. Decidió irse a las categorías inferiores del Manchester United pero su antiguo club no se lo puso nada fácil: alegaba que incumplía un acuerdo de no captación.
Aprovechando la polémica, su primer club (Torcy) también dijo que habían empleado las mismas tácticas para llevarse al francés (en referencia a Le Havre). En cualquiera de los casos, la FIFA resolvió que todo estaba en orden, y debutó con el primer equipo inglés en septiembre de 2011.
Pese a que Sir Alex Fergusson confió en darle minutos para probarle, acabó decepcionado porque no renovó y al año siguiente Pau Pogba se marchó a la Juventus. Fueron 4 años desde la temporada 2012-2013 en los que el portentoso centrocampista demostró que era todo un diamante. Se llevó el Golden Boy y dejó actuaciones exquisitas, no solo con su físico, sino también con su capacidad de asistir y anotar desde disparos lejanos. Fueron 4 años de un dominio abismal a nivel nacional, aunque sin suerte en el aspecto continental en lo que se refiere a club.
Porque a nivel de selecciones Pogba tuvo la misma importancia capital para les bleus. Ganó el Mundial de Fútbol sub 20 en 2013 y el Mundial 2018 en Rusia, dejando claro el prometedor futuro que le esperaba a la selección francesa.
Como la vida es muy caprichosa, tras su estancia en la Juve, en la temporada 2016-2017 Paul Pogba regresa a la que un día fue su casa, al Manchester United por la insultante cifra de 120 millones de euros. Su evidente trascendencia llevó a los red devils a conseguir la Copa de la Liga y, además, la UEFA Europa League, en lo que suponía su primer título continental a nivel de clubes.